Se equivoca Pedro Suarez Vertiz al decir que triunfó porque en la época más convulsionada de nuestro país (terrorismo y dictadura) eligió ser “apolítico”.

Ser apolítico es tomar posición, él eligió darle la espalda a su país en el momento que más lo necesitaba. Él eligió cantar que su “auto era una rana” y no sobre otros muchachos que como él eran desaparecidos o detenidos, acusados injustamente de terrorismo por los agentes de la dictadura de Alberto Fujimori padre de Keiko, su hija y sucesora con quien muy apolítico él se toma fotos y le desea algún día sea presidenta.

El Pedro Suárez Vértiz apolítico, hijo de modelo famosa como sus amigos y de billetera gruesa como su entorno, se paseaba por las discotecas cantando de “tomar un vino y una cerveza y hacer el amor” o de “los globos del cielo”, mientras el país se caía a pedazos entre sangre y corrupción. Lo más parecido que hizo a protestar fue escribir “Degeneración actual”, una canción conservadora, machista, homofóbica y de mal gusto.

No voy a decirle a alguien que no cante de amor, cómo podría yo… Esta bien cantar de lo que se quiera, pero decirse apolítico y que esa es la razón de su éxito es una mentira cobarde. Pedro Suárez Vértiz podía vivir en ese Perú que nunca se vio realmente afectado por el terrorismo o la dictadura. Que no joda Pedro Suárez Vértiz… no es apolítico, al contrario, es sumamente político y su discurso es el de quienes desde el podio de sus privilegios de clase creen que pueden decirle al resto cómo deben ser y que sean como él.

Otra cosa… Hay que pensar que el mundo es plano y del tamaño de una servilleta para decir que Pedro Suárez Vértiz triunfó… qué pocas aspiraciones las de Pedro. ¿Hizo carrera fuera del país? No hablo de tocar fuera para la comunidad peruana que no es lo mismo. Hablo de una carrera firme y seria fuera de nuestro país donde él existe gracias a sus privilegios y a la radio de la que pocos son dueños, radio que insiste en pasar la música de su amigo inventado.

Hace un mes 8 exmilitares chilenos fueron finalmente condenados a 18 años de cárcel por el asesinato de Víctor Jara. Un músico chileno que no solamente es reconocido y referencia para otros músicos en todo el mundo, sino que hizo de su música, su guitarra y su voz un instrumento de resistencia contra la dictadura de Pinochet. Fue detenido y llevado al en ese entonces Estadio de Chile junto a muchos otros opositores de la dictadura, fue torturado, se le fracturaron las manos para que no pueda tocar guitarra nunca más, se le ejecutó de un balazo en la cabeza y luego se le acribilló con 44 balazos. Su cuerpo fue tirado a una fosa común como NN y después de un tiempo recién su esposa pudo reconocer el cadáver para darle sepultura.

Cualquier párrafo escrito por Víctor Jara tiene más valor en Latinoamérica y el mundo que el mejor de los discos de Pedro… o que cualquiera de los artículos cojudos que escribe en páginas y revistas. Víctor Jara no fue apolítico, Víctor Jara no fue un cojudo y, sobre todo, Víctor Jara no fue un cobarde.

¿De qué éxito habla entonces Pedro Suárez Vértiz? Nadie que diga que callar ante la injusticia es la clave del éxito merece respeto. Púdrete Pedro.

*Texto escrito por el vocalista de Diazepunk.