El Cuarto Juzgado Constitucional de Lima consideró un peligro para el ambiente la ampliación de la avenida Aramburú y le prohibió al alcalde Luis Castañeda realizarla.
El juez Juan Macedo Cuenca consideró infundada la solicitud del alcalde de Lima, Luis Castañeda, para continuar con la construcción de la obra. Se supo que en la resolución preliminar la obra no tenía certificación ambiental cuando la sala aprobó la medida cautelar en primera instancia.
Recordemos que, en febrero de este año, Castañeda Lossio se mostró confiado al afirmar que sus obras de mejoramiento sí se realizarían, pues contaba con la documentación suficiente para fundamentar el proyecto que, según él, beneficiarían a los vecinos de San Isidro y al ambiente.
“En cuanto a estudios ambientales, tenemos un expediente de más de mil folios. Confiamos en que el tema judicial se resolverá en favor de la Municipalidad de Lima. El proyecto es muy beneficioso en materia ambiental, porque colocaremos muchos más arboles de los que se retiran. Nosotros somos conocidos por el sembrado de árboles”, aseguraba cuestionado alcalde de Lima.
Ciudad de cemento
Castañeda se ha ganado la desconfianza de los limeños por casos como el de la Alameda 28 de Julio; obra que —según el proyecto— contaría con ocho mil metros cuadrados de áreas verdes. La expectativa no ilusionaba a los limeños y la realidad nos presenta una obra de cemento cuyas pocas áreas verdes son de grass sintético. Esa obra le costó a Lima casi 26 millones de soles.
Para la obra, que estaría ubicada en el distrito de San Isidro, se prometía un mejoramiento de la avenida Aramburú en una extensión de 1.4 kilómetros (primera etapa desde la Vía Expresa de Paseo de la República hasta la avenida Del Parque Sur); la ampliación del ancho de la calzada ya no sería de dos carriles, sino de tres por vía.
Ante la decisión del Juzgado, el alcalde de San Isidro, Manuel Velarde, manifestó su entusiasmo y dijo que “el juez Macedo nos dice que no todo está perdido en el Perú, que el sistema judicial cuenta con jueces probos y consecuentes con sus principios, a los que no le va a temblar la mano para hacer lo correcto”.
Asimismo, para el alcalde Velarde eran cerca de 100 árboles y 2500 m2 de áreas verdes peligraban con la obra dispuesta por el alcalde de Lima.