Las autoridades de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, a través de la Oficina General de Imagen Institucional, se pronunciaron sobre el suicidio del expresidente Alan García, dando las condolencias a la familia y amigos, pero sorprendió a todos que, siendo una institución que representa la búsqueda del conocimiento y de la verdad, a través del análisis de la realidad peruana, se pronunciara levantando sospechas acerca del actuar del Poder Judicial en el país.
En el pronunciamiento, la UNMSM advierte sobre “los riesgos de la judicialización de la política” y la “polarización” que esta desencadenaría. Este pronunciamiento está en la línea de lo dicho por el cardenal Juan Luis Cipriani, Alfredo Barnechea y políticos apristas y fujimoristas, que buscan responsabilizar al gobierno y al Ministerio Público del desenlace decidido por el expresidente para no enfrentar a la justicia.
El comunicado también resalta que García fue sanmarquino y que su legado será valorado por la historia, sin ninguna crítica o cuestionamiento a este legado cargado de corrupción. Y además exhortan a las autoridades a respetar los procedimientos legales y los derechos de los ciudadanos, como si esto no viniera ocurriendo por fin en un país consumido por la corrupción y a impunidad. Por último, señala que aspiran a una “nación reconciliada” (¿con los corruptos?).
El lamentable comunicado sorprendió a la comunidad sanmarquina que ha manifestado su rechazo ante este hecho.
La Facultad de Filosofía se pronunció de forma contundente haciendo pública su discrepancia con el pronunciamiento del rectorado dándole su respaldo a los fiscales y jueces que luchan contra la corrupción en el Perú y rechaza “el uso político que se viene haciendo de la situación en la que nos ha colocado la decisión estrictamente personal del expresidente”.