Francisco Durand Arp Nissen (Lima, 1950 – Texas, 2023), sociólogo y catedrático, falleció el 1 de febrero a los 73 años y quienes lo conocieron no dejaron de lamentar su partida en las diversas redes sociales. Durand fue un conspicuo investigador de los grupos de poder económico peruanos, de sus estructuras, de sus formas de perdurabilidad y de sus lazos con la corrupción. ¿Cómo los ricos se hicieron tan ricos? Durand lo responde en más de 20 libros, incidiendo sobre todo en los tiempos de Alberto Fujimori, Vladimiro Montesinos y su estrecha relación con los Romero y la Confiep.
La Derrama Magisterial publicó un sentido homenaje, en donde resume parte de sus investigaciones y lo que significa su pérdida:
“Nuestra institución lamenta el sensible fallecimiento de Francisco Durand Arp Nissen, destacado investigador y catedrático universitario, ocurrido el miércoles 1 de febrero. Se trata de una pérdida irreparable para el mundo de las ciencias sociales peruanas y latinoamericanas, debido a sus trascendentales aportes a la historia reciente a través de sus profundos estudios y reflexiones relacionados al surgimiento de los nuevos grupos de poder económico y político que moldearon las relaciones institucionales del Perú en los últimos cincuenta años.
Durand era Doctor en Filosofía por la Universidad de Berkeley, California (EE.UU.) y Magíster en Sociología por la Pontificia Universidad Católica del Perú, en la que además se desempeñó como profesor principal del Departamento Académico de Ciencias Sociales e investigador asociado en el Centro de Estudios y Promoción del Desarrollo (DESCO). Ha publicado más de cincuenta libros e infinidad de artículos en medios impresos nacionales e internacionales.
Su interés por la evolución de las élites económicas y su relación con el poder se manifestó desde sus ensayos a finales de los ochenta, como por ejemplo Alan García y los empresarios (en el libro Los empresarios y el Estado en América Latina, Universidad Nacional Autónoma de México, 1988) o La nueva derecha peruana: orígenes y dilemas (1990). Entre sus más destacadas publicaciones destacan: El Perú fracturado: Formalidad, informalidad y economía delictiva (2008), Los Romero: Fe, fama y fortuna (2013), Los doce apóstoles de la economía peruana (2017), Odebrecht: La empresa que capturaba gobiernos (2018), La democracia del dinero (2020).
Francisco Durand colaboró con Derrama Magisterial como coautor, junto al historiador Jesús Cosamalón Aguilar, del Tomo 6 de nuestra colección Nueva Historia del Perú Republicano (2021), titulado La República Empresarial: Neoliberalismo, emprendedurismo y desigualdad (1990-2021). En este volumen, los autores analizan los cambios económicos, políticos y socioculturales que se dieron desde 1990 como resultado de la gran migración a las ciudades, la mayor integración del territorio, las nuevas tecnologías y la crisis heredada de la década anterior“.
Asimismo, diversas personalidades de las ciencias sociales y de la política no dudaron en despedirse del maestro, que gran falta nos hará.
Alberto Adrianzén
ADIÓS COMPAÑERO:
Hoy se fue el gran Paco Durand. Sociólogo, pero sobre todo un intelectual público de izquierda. Investigador de los grupos empresariales. Cada libro suyo fue expresión no solo de su seriedad académica y profesional, sino también de su compromiso con la lucha por el cambio del país. Paco era, pues, de esos intelectuales que nos plantean otra forma de pensar. Por eso también era polémico. Lo que decía, escribía y publicaba, “molestaba” (y mucho) a unas élites excluyentes que hoy la gran mayoría de peruanas y peruanos rechazan.
Paco era un gran y querido amigo. Su ausencia duele porque se va uno de los mejores. Siempre he creído que cuando uno muere, vive en la memoria de los otros. La memoria de Paco lo hace más vivo que antes. Saludos por allá compañero. Y a Tula, su compañera de ideales y de vida, y a sus dos hijas, mi cariño como siempre.
Sigrid Bazán
Lamento mucho la partida de Francisco Durand, ‘Paco’. Destacado sociólogo y brillante investigador. Nos deja sus valiosos estudios sobre de los grupos económicos y de poder en el Perú. Fue uno de los pocos académicos dedicados al estudio de la realidad peruana. Importante recordar cuando escribió sobre los lobbies, puertas giratorias y paquetazo ambiental en Perú. Así como sus estudios sobre la corrupción desde los años 90, el escándalo de Odebrecht, la captura del Estado por parte de las élites económicas, las relaciones perversas del dinero y la política, entre otros textos que hoy están más vigentes que nunca.
Jorge Frisancho
Ha muerto el sociólogo Francisco Durand, quizás el más valioso intelectual de nuestra izquierda y un ejemplo de seriedad, honestidad, persistencia e inteligencia que todos haríamos bien en seguir. No lo conocí pero lo admiré, lo leí desde siempre y aprendí muchísimo de él. Nos va a hacer falta.
Laura Arroyo
FRANCISCO DURAND TENÍA RAZÓN: EL NUDO DEL PODER
Francisco Durand, un valiente como pocos, se ha despedido. Un hombre que desnudó al contubernio de poderes y en más de un libro, entrevista, artículo, etc. supo explicar el nudo de poder que sigue vigente en Perú. Un hombre de método y rigor, pero también de ternura. De la mejor ternura, la revolucionaria. La ternura que transforma y, por lo mismo, es la que mejor abraza en un país como el Perú. Nos hará más falta hoy que ayer.
Durand supo hablar firme y fuerte para explicar las relaciones entre el poder empresarial, el poder económico, el poder político y el poder mediático. Aprendí de él (y no se lo dije lo suficiente) que ‘poder’ no es una palabra banal. Que el poder no es tampoco una palabra en singular. Que el poder es necesariamente la articulación de muchos poderes. Que cuando hablamos de “separación de poderes” en el Perú estamos mintiendo o predicando a una ilusión que ese mismo contubernio de poderes nos ha querido hacer creer que existe. Aprendí también que ganar elecciones no significa tampoco tener EL poder. Lo confirmamos con ese Humala que fue doblegado por los poderes y traicionó por dicha presión -y anhelando irresponsablemente ese aplauso- sus promesas y a su gente. Lo comprobamos notoriamente tras el periodo de Pedro Castillo a quien ese nudo del poder peruano se encargó de recordarle que ganar en las urnas no significa realmente tener poder en el Perú. Y lo comprobamos también hoy cuando vemos la dictadura que cogobiernan ese poder económico, empresarial, político y mediático que Durand ya había anticipado con valentía y precisión.
La realidad se repite recrudecida, pero no es original en el guión. Lo que hoy Perú padece es exactamente aquello que se consumó durante la dictadura fujimontesinista donde el poder empresarial y económico fue alfil clave para sellar el pacto. Y por eso su defensa constante de la candidatura de Keiko Fujimori no es una defensa política ni siquiera ideológica en términos principistas, sino en defensa de su pacto de impunidad y beneficios y privilegios para ellos. Por eso es Keiko Fujimori un día, PPK después o Dina Boluarte al día siguiente. Porque es el pacto y el modelo el que ese contubernio de poderes defiende y no a quienes los abanderan que son circunstanciales y útiles eventualmente.
Esa es la motivación detrás de cada portada del Grupo El Comercio avalando cuanto discurso terruqueador sea posible. Esa es la motivación por la cual la Confiep no ha lamentado ni una sola muerte por la represión de Boluarte, pero estuvo muy activa durante todo el gobierno de Castillo disfrazándose de gremio que lucha contra la corrupción. Esa es la motivación por la cual los empresarios y banqueros tan ávidos a hablar de las desgracias económicas que nunca aciertan pero repiten igual cada vez que hay un candidato incómodo, hoy callan. Esa es la razón por la cual durante la campaña el poder mediático pone todas sus apuestas en una candidatura de manera explícita y renunciando a hacer periodismo, pero tras las elecciones se reciclan con nuevos rostros, nuevos columnistas, nuevos periodistas y nuevos nombres de programas televisivos para limpiar esa vergonzosa acción lobbysta electoral. El motivo es siempre uno: sostener el pacto entre poderes que garantizan así nunca dejar de gobernar. Porque ese nudo de poder en el Perú hasta cuando pierde las elecciones, las gana. Hoy lo estamos viendo claramente.
De todo esto hablaba ya hace mucho Francisco Durand. Sobre todo esto nos enseñaba. Apuntaba al nudo y no a la superficie. Articulaba los intereses y nos mostraba la foto completa al hablar de la arquitectura del poder en el Perú y no solo de casos aislados, porque no eran ni son casos aislados, sujetos aislados, intereses individuales. El nudo, el contubernio, el pacto. O, lo que he definido en este espacio como Dictadura Cogobernada. A fin de cuentas estamos hablando de eso mismo.
Hoy que a Francisco se le recordará mucho, he querido hacerlo así. Recordando lo que nos ha entregado. El valioso aporte que nos ha dado y que excede muy de lejos lo que ya es difícil de exceder: su capacidad de debate, su cariño para los amigos, sus aplausos y reconocimientos sinceros cuando algo que habías señalado le parecía pertinente y útil. Me quedo con eso, con las conversaciones largas en algún espacio colectivo, el pollito a la brasa que acompañábamos con una guarnición de reflexión política y otra adicional de reflexión económica. Con la sonrisa honesta, el “vuelve pronto, Laura” y las mil lecciones que todavía no he terminado de aprender.
A Durand hay que recordarlo porque es uno de los pensadores más vigentes y lúcidos en Perú. Y muy subvalorado. Es de los grandes sobre quien podemos decir “tenía razón”. Porque la tiene. Esta dictadura lamentable se la da a cada hora que pasa. Cuanta falta nos vas a hacer, Francisco.
Alberto Graña
Me tomé la libertad de publicar esta misiva privada porque ya es de conocimiento público la dolorosa noticia que nos comunicó Tula su querida esposa a Humberto Campodónico y a mi persona (Beto) el día de su partida a otra dimensión. Paquito -como lo llamábamos con cariño y gran respeto- fue un colega invalorable durante una década de colaboración activa como miembro responsable de escribir mes a mes su columna sobre grupos de poder en el Perú, miembro del comité editorial de Actualidad Económica, y mejor y querido amigo todo el tiempo después hasta su partida. Por supuesto que lo voy a extrañar, personas de su integridad moral e intelectual como pocos son difíciles de encontrar.
Queridísimos Humberto y Beto:
He escrito estas pequeñas líneas, para ustedes y los amigos.
Paquito se nos fue.
José Francisco Durand Arp Nissen
Deja la tierra, la muerte física. Entra a otra dimensión. Aquella en la que se encontrará con las personas buenas como él.
Las personas especiales que lucharon de distintas formas toda una vida por un país más justo, más equitativo.
El Perú y sus problemas, sus esperanzas y posibilidades siempre ocuparon lugar central en la vida cotidiana familiar, en las actividades académicas, en las intelectuales a través de sus libros, escritos y conferencias, en los diálogos con sus dilectos amigos. I también su magnánimo y generoso corazón, siempre dispuesto a ayudar calladamente al prójimo, pues la modestia, fue también un signo distintivo en él.
Hasta ayer, pedía escuchar como cada día solía hacerlo, a Glatzer Tuesta en su programa de Ideele Radio. Estaba abatido y triste por los acontecimientos de los últimos dos meses. No pudimos regresar a Lima y cumplir su último deseo. Lo haremos pronto con sus cenizas.
Adiós a mi compañero de cincuenta años. Cumpliré sus deseos junto con nuestras hijas y nuestros más cercanos amigos de presentar sus dos últimos libros, de crear el fondo de becas para los ‘nadies’ del Peru profundo. Para ellos serán dedicados sus libros. I su extensa biblioteca para las universidades San Antonio Abad del Cusco y la Universidad del Altiplano de Puno.
Nelson Manrique
La noticia de la muerte de Francisco Durand es un duro golpe para quienes tuvimos el privilegio de disfrutar de su amistad. Paco ha sido un gran intelectual, sencillo, muy agudo como investigador. Un trabajador tenaz, que deja una obra fundamental, aún no suficientemente valorada. Sus estudios sobre la conformación y el desarrollo de la burguesía peruana son fundamentales para poder construir una imagen precisa de nuestra sociedad contemporánea. Participó en el lanzamiento del proyecto de la revista La Corriente, que animamos junto con otros intelectuales de izquierda. Sobreponiéndose a sus problemas de salud siguió trabajando incansablemente hasta el final. Se nos ha ido un imprescindible. Descansa en paz, Paco.
Aldo Panfichi
Paco fue mi profesor del Taller Urbano Industrial cuando era estudiante de pre grado. Luego fuimos colegas y amigos, un gran profesor y un autor prolífico. En los últimos años mientras daba la batalla por la vida siguió investigando y publicando. Hace pocas semanas me escribió y envió su último libro en co-autoría con John Crabtree que será publicado en inglés por una editorial de prestigio. Me contó con alegría que había logrado introducir una clausula en el contrato de publicación reservándose los derechos en Español. Siempre prensando en el Perú y en el Fondo Editorial de la PUCP, donde ha publicado varios de sus libros, quedamos que buscaríamos traducir y publicar con nuestro sello editorial. Ahora las malas noticias llegan rápido. Una gran perdida, tenemos el consuelo de tener sus ideas y reflexiones. Vuela alto querido Paco, ya te extrañamos.
Aquí pueden descargar su libro “Odebrecht: la empresa que capturaba gobiernos” (Fondo Editorial PUCP, 2018): https://bit.ly/3RmoVxb
Aquí pueden revisar algunas de sus entrevistas:
“En el Perú, formalidad, informalidad y delito son parte del mismo sistema“
“El golpe económico de Fujimori liquidó la burguesía nacional”
Los grandes acomodos de la derecha
“El sector privado no ha demostrado ser eficiente y competitivo en la salud”