La Junta Directiva del Sindicato Único de Trabajadores de la Biblioteca Nacional del Perú anunció un paro de 48 horas debido, según señalan, al incumplimiento de los acuerdos, las dilaciones y la falta de respuesta de las autoridades desde hace 8 meses.
En nota de prensa manifestaron que han solicitado un acuerdo arbitral para restablecer las condiciones de trabajo ya pactadas en 2015 y 2017, y que tomarán la medida de fuerza los días 2 y 3 de agosto hasta superar el impasse provocado por la postergación y violación de sus derechos laborales.
Les dejamos sus demandas:
Agotados los mecanismos de negociación por el respeto a los convenios colectivos, por el restablecimiento de las condiciones de trabajo, de acuerdo a lo pactado los años 2015 y 2017. Como salida al conflicto hemos solicitado un Acuerdo Arbitral, sin respuesta de la autoridad y con maniobras dilatorias. En tal sentido nos vemos obligados de hacer uso de nuestro derecho de huelga, amparado por la Constitución Política del Perú, paralizando las labores, los días jueves 2 y viernes 3 de agosto, en
todas las sedes y servicios de la BNP.
Llevamos ocho meses de conversaciones sin resultados. Responsabilizamos a la Dra. María Emma Mannarelli, Jefa Institucional y a la Abog. Emma León Velarde, Gerente General y su cuerpo directivo, por venir postergando y violentando sistemáticamente derechos laborales ganados por pacto colectivo, manteniendo la política antitrabajador, antisindical de no respeto a los Tratados Internacionales OIT que amparan los derechos fundamentales de los trabajadores.
La falta de justicia y respeto a los derechos fundamentales de los trabajadores agravaron el clima laboral, llevándonos al agotamiento de los mecanismos de negociación; ésta gestión ha preferido priorizar el incremento de sueldos de los altos funcionarios (del 9 Mil a 13,500 soles), gastos superfluos como la construcción de un baño privado para un directivo, contratos CAS para los amigos personales y allegados de la gestión, con sueldos entre 8 mil y 13 mil soles, proliferación de asesorías y
consultorías sin productos palpables; entre otros gastos que no responden a las funciones estratégicas de la Biblioteca Nacional, como por ejemplo la adquisición de libros para el servicio de salas que no se ha programado por mucho tiempo.
En estos dos días de paralización esperamos que las autoridades en lugar de reprimirnos, reflexionen y nos llamen para suscribir el acuerdo arbitral, dando por superado el conflicto y podamos recuperar el tiempo para avanzar en la modernización de la carrera administrativa y otros.
Finalmente, decimos que estamos atentos y vigilantes para denunciar la corrupción en los formatos que se presenten y lograr con ello que se inviertan eficientemente los recursos en mejores servicios, infraestructura y tecnologías para los usuarios y no solo en planillas doradas, tal como lo ha pedido en su mensaje nuestro presidente Martín Vizcarra.
1 de agosto de 2018
