La Comisión del Congreso que “investiga” a los funcionarios que participaron en la reelaboración y elaboración de los textos escolares de Desarrollo Personal, Ciudadanía y Cívica de educación de secundaria (textos que han sido satanizados por las mentiras de grupos antiderechos), presidida por la congresista fujimorista Milagros Salazar, está claramente parcializada en su contra debido a que dichos textos implementan el enfoque de igualdad de género y la Educación Sexual Integral.
El único fin de la Comisión es “castigar” a todos los que apostaron en el Ministerio de Educación por la política curricular y el enfoque de igualdad de género. En el caso de los funcionarios, han sido afectados en sus derechos, tanto laboral, económico y moral, por afrontar un proceso administrativo sancionador dentro del mismo ministerio, el vacío en el que los dejó la ministra de Educación al compartir las mentiras de los grupos fundamentalistas, y la probable demanda judicial a la que se enfrentan. Todo por una mentira: que el texto era pornográfico.
Esta situación trae otras graves consecuencias como atemorizar a los especialistas a los que les corresponde la implementación del Currículo Nacional y sus enfoques; ya sea desde la elaboración de materiales, capacitaciones a docentes, o diseño de clases.
La Comisión, que tiene un nombre larguísimos y busca perseguir a seis ministros (comisión encargada de “investigar las presuntas irregularidades en el proceso de elaboración, edición, revisión, reproducción, adquisición y distribución de los materiales educativos de la educación básica en las gestiones de los siguientes ministros de Educación Patricia Salas O’Brien, Jaime Saavedra Chanoví, Marilú Martens Cortés, Idel Vexler Talledo, Daniel Alfaro Paredes y Flor PabloMedina que habrían originado una afectación económica al erario nacional y un perjuicio al derecho a acceder a una educación de calidad y pertinente al nivel y grado en perjuicio de los alumnos de las instituciones públicas del país”), ha estado citando a los especialistas para interrogarlos de mala manera y faltándoles el respeto. como se observa en las pocas grabaciones realizadas a esta Comisión por el personal del Congreso, puesto que hay sesiones a las que Milagros Salazar las declara reservadas, sin explicar el por qué.
El 22 de mayo, Salazar maltrató a las funcionarias Patricia Gastulo, exdirectora de la Dirección de Educación Secundaria, y a Jessica Simón, exdirectora de la Dirección General de Educación Básica Regular, callándolas de forma autoritaria y sosteniendo que ellas deben solamente responder, así no entiendan la pregunta, esta no sea correcta o busque direccionar la respuesta, para responder como a Salazar le gustaría que lo hagan.
Pero esto no es lo único malo de esta Comisión que busca criminalizar a los especialistas, sino que también aprovecha para invitar a personajes nefastos para la educación peruana, y el país en general. Este es el caso de la presencia de la excongresista Martha Chávez, fiel partidaria del exdictador Alberto Fujimori.
Chávez estuvo en la Comisión el 10 de junio para informar “sobre su participación en la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer (Beijing, 1995), y las reservas que interpuso el Estado peruano al tema de género y salud reproductiva”.
Como informa la prensa del Congreso, la excongresista señaló que “en dicho evento internacional participamos cinco congresistas del Perú, quienes en representación del Estado peruano, hicimos llegar nuestros aportes y puntos de vista sobre la problemática de la mujer, familia, temas de género y salud reproductiva, entre otros temas, pero pusimos mayor énfasis en los derechos sexuales y las comunidades indígenas. Hubo mucha participación e influencias en estos temas de parte de diversas ONG nacionales e internacionales para hacer prevalecer sus puntos de vista”.
Recordemos que luego de la participación del gobierno peruano en Beijing, se creó el Ministerio de la Mujer, para aparentar que el gobierno fujimorista cumplía con los derechos de las mujeres, ad portas de la investigación de Giulia Tamayo sobre las esterilizaciones forzadas, política genocida que dañó el cuerpo, la salud y la vida de miles de mujeres, en su mayoría andinas y quechuahablantes, quienes fueron engañadas o amenazadas para ligarse las trompas. Chávez nunca estuvo interesada en los derechos de esas mujeres.
Este viernes 14 de junio se presentará Giuliana Calambrogio, otra representante de los grupos antiderechos, vocera de Padres en Acción y la Marcha por la Vida. Según la agenda, está invitada para brindar “análisis pedagógico de los textos escolares de secundaria del Minedu y su incidencia en la formación de los estudiantes”.
Calambrogio, personaje muy activo en redes sociales para oponerse a la autonomía de las mujeres, en una entrevista justificó el acoso sexual contra las adolescentes señalando que esta violencia era responsabilidad de ellas por usar determinadas ropas; así también, les recomendó ser serviciales y atentas para que un hombre “las vea”.
“Cuando yo enseñaba a las chicas en tercero de media, era eso, decían: ‘Miss, no importa cómo camino yo, cómo estoy vestida o bueno, desvestida a veces, pero me tienen que respetar. Yo les dije: ‘Cuando tú te pones esos escotes o esas faldas tan cortas, quien no respeta eres tú a los chicos, porque tú le estás dando un mensaje con la ropa”.
El fujimorismo no cambia, solo se transforma. Ahora es a través de la educación, a la que pauperizaron en los tiempos en los que eran gobierno, que impiden el avance de los derechos de niñas, niños y adolescentes, para que puedan vivir libres de violencia.