La Libertad ha sido uno de los departamentos que más feminicidios ha enfrentado este 2019, sumando en total 11 con el asesinato, el 23 de diciembre último, de Martina Cruz Haro, una madre de familia de 41 años, quien tenía cinco hijos con Pepe Ubaldo Salinas Mendoza (41). Salinas decidió legarle a sus hijos la peor Navidad posible al matar a su madre y luego suicidarse, debido a su incapacidad para aceptar que Martina no le pertenecía.
Martina Cruz ahora es parte de la lamentable cifra de feminicidios de este año, en el que 164 mujeres han sido asesinadas por la violencia machista de sus parejas o de hombres que han creído tener el derecho de cegarles la vida.
Feminicidios en La Libertad
María Lisbet Paulino Vásquez (40) estaba embarazada de tres meses cuando su pareja la agarró a golpes en el distrito de Chicama el 24 de enero. La golpiza ocasionó la muerte fetal intrauterina y una infección generalizada que la llevó, cinco días después, a ser internada en el Hospital Regional de Trujillo en donde agonizó por dos semanas falleciendo el 19 de febrero. El asesino, un avezado delincuente, sigue sin ser identificado y capturado debido al miedo de los familiares por las consecuencias que esto les traería.
Sandra Yumiko Flores Esquivel (32) fue baleada por su pareja Juan Carlos Alvarado, quien luego se suicidaría, en la localidad de Cartavio, distrito de Santiago de Cao, provincia de Ascope. Ellos tenían tres hijos. Fue la madre de Sandra quien encontró los dos cadáveres en la casa en donde convivían, ella tenía un balazo en el tórax y él en la cabeza.
Yeraldy Lisset Villanueva Crespín tenía 18 años y había desaparecido desde el 24 de mayo, 21 días después, el 14 de junio, su cadáver fue encontrado enterrado en una poza de unos cañaverales por el sector Cerro La Piña, en la provincia de Virú. La policía logró la confesión del feminicida, Paolo Pizán Villanueva (20), quien era pareja de Yeraldy.
Luzmila Bustamante Reyes tenía 70 años y profesora y comerciante. Ella fue estrangulada y torturada (atada de pies y manos) y su cuerpo fue hallado en una poza de oxidación cubierto de ramas secas en el distrito de Pacanga, provincia de Chepén el 12 de agosto. Su asesino es aún desconocido.
Diana Araceli Reyes Chacón tenía 31 años y era madre de dos adolescentes de 12 y 14 años. Ella fue asesinada a balazos en el Complejo de Mansiche en Trujillo, frente a sus hijas, por su expareja Luis David Gutiérrez Vereau (38), quien tenía denuncias por violencia, y que luego del asesinato se suicidó.
Almeida Dávila Tapia tenía 29 años y tres hijos. Ella estaba desaparecida desde el 27 de julio, su cadáver fue encontrado enterrado el 18 de agosto en un hueco de medio metro en un campo de sembrío en la zona de Pacanguilla en el distrito de Chepén. Genner Ullilen Echevarría (34), su expareja, la había asesinado golpeándola en la cabeza con una piedra.
Gladis Roxana Infantes Alegría tenía 29 años cuando fue estrangulada el 25 de noviembre en Trujillo por Manuel Jesús Peralta Callirgos (26), su pareja, quien había intentado hacer pasar su asesinato como suicidio cortándole las muñecas. Peralta tenía una denuncia por violación sexual, dos denuncias por violencia física y una denuncia por violencia psicológica.
Juana Rodríguez Jara tenía 48 años y dos hijos cuando fue Víctor Herrera Rodríguez (50), su pareja, quien luego se suicidio. Esto sucedió en el distrito de Marmot, Gran Chimú el 1 de diciembre.
Fedra Llonto Guaylupo tenía 29 años y era policía. Ella fue asesinada por su pareja Ronald Soto Ramos (28), quien también era policía y se suicidó luego de matarla. Esto sucedió el 6 de diciembre en el distrito de Pacasmayo.
