Debido a las declaraciones que el conductor Carlos Galdós hiciera sobre la situación carcelaria de Keiko Fujimori, fujimoristas alzaron su voz de protesta y exigieron que la Comisión de la Mujer se pronunciara al respecto.
La presidenta de la Comisión, Tania Pariona, quien continuamente se ha pronunciado en contra del acoso político hacia las mujeres como forma de violencia de género que no permite que más mujeres puedan participar activamente en política, señaló que realizarán ese pronunciamiento que han pedido, como colegiado, incluyendo las referencias denigratorias a Keiko Fujimori así como las diversas formas ofensivas con las que se ha referido a otras mujeres.
Pero ¿qué dijo el incómodo conductor, del cual no es novedad escuchar este tipo de expresiones?
A partir de las declaraciones de la abogada de Fujimori, de que la detenida se bañaba solamente con una jarra de agua de un balde, incidiendo en las deplorables condiciones carcelarias en las que vive, y que viven desde hace décadas miles de reclusos en el Perú, el conductor, a modo de broma, señaló lo siguiente:
“Tú, que abres la ducha y te quedas 20 minutos debajo de la ducha y te enjuagas todo ¿te has puesto a pensar que Keiko con una tacita de agua, con las justas se enjuaga un pezón? Piénsalo”.
Añadiendo que:
“¿No te has puesto a pensar que Keiko no tiene ni siquiera acondicionador para el vello p***co? ¿Por qué me haces los ojos así Carla? ¿No te echas acondicionador? Yo sí conozco gente que se echa acondicionador ahí, mientras que Keiko, se lava con una jarrita”.
Estas declaraciones generaron la ira de los fujimoristas y de muchas personas en contra de la violencia verbal hacia las mujeres. El conductor tuvo que disculparse:
“Reconozco mi exceso con Keiko Fujimori ayer en mi programa de radio. Me disculpo como corresponde de manera sincera y avergonzado. Lo mismo con mis oyentes”.
Galdós señaló en el programa Beto a saber, que debido a esas lamentables declaraciones, su madre y su hija han sufrido violencia
“¿Qué me ha perturbado el día? Golpe de 01:30 p.m., mi hija me llama por teléfono del colegio y me dice, muy nerviosa y asustada, que recibió insultos. No entiendo cómo miércoles pueden conseguirse el número de mi hija y de mi ‘vieja’ (su madre). Mi madre decidió no contestar más el teléfono desde la tarde. Mi hija es una niña de 12 años”.
Es loable que los fujimoristas piensen en la violencia de género que se está ejerciendo sobre su líder, a pesar de que en situaciones parecidas, como cuando insultan a Verónika Mendoza, incluidos algunos congresistas fujimoristas, nunca dijeron nada. Es más, intentan que no se legisle sobre la violencia de género, y exigen que se quite la palabra “género” de todas las leyes y políticas peruanas. Recordemos también que se encuentra pendiente el desafuero del congresista Moisés Mamani por tocamientos indebidos contra una aeromoza.
Esperamos que sea el inicio de un gran cambio, empezando por asistir a las sesiones de la Comisión de la Mujer, pues nuevamente se canceló por falta de quórum, los congresistas fujimoristas solo se aparecieron para poner en agenda su molestia contra Carlos Galdós.