Mano Alzada
Actualidad, Memoria

Primer juicio oral público contra general por matanza de Cayara

Este viernes 9 de agosto a las 8 am se realizará el primer juicio oral público al exgeneral José Valdivia Dueñas, jefe político militar en Ayacucho, quien implementó el Plan Operativo “Persecución”, que originó la masacre de Cayara dejando un saldo de 32 personas asesinadas entre hombres, mujeres y niños.

La congresista Tania Pariona anunció que participará en la audiencia y en el plantón que se está organizando para visibilizar esta deuda pendiente del Estado peruano con las víctimas de esa zona.

Los hechos

Como represalia por el ataque senderista a un convoy del Ejército Peruano de la Base de Pampa Gallo, que dejó 4 policías muertos y 15 heridos el 13 de mayo de 1988, el general José Valdivia Dueñas, en ese entonces jefe político militar de la zona, convocó a otros oficiales del Cuartel de Ayacucho, con los que planeó el Plan Operativo “Persecución” para capturar y/o eliminar a los terroristas que participaron en la emboscada y recuperar el armamento.

El 14 de mayo de 1988 a las 9 de la mañana los miliares entraron a Cayara y pueblos aledaños cerrando la carretera para que nadie tenga la posibilidad de escapar frente a la matanza que se avecinaba.

El primer asesinado fue el poblador Máximo Asto Palomino, luego fueron contra un grupo de pobladores que se encontraban en el exterior de la iglesia bebiendo y celebrando la culminación de la festividad de la Virgen de Fátima. Detuvieron a cinco de ellos y les dieron muerte al día siguiente. Posteriormente se dirigieron a Ccehua en donde detuvieron a 80 pobladores, los obligaron a tirarse encima de plantas de cactus y les caminaron encima. 23 de ellos fueron asesinados ese día, al día siguiente asesinaron a tres más.

Represalias

Cuando se hizo pública la masacre de los pobladores de Cayara, empezaron a matar a los testigos. El 29 de junio secuestraron y desaparecieron a Guzmán Bautista, Gregorio Ipurre, Humberto Ipurre, Benigna Valenzuela y Catalina Ramos, quienes habían denunciado públicamente los asesinatos.

Martha Crisóstomo fue la siguiente víctima. El 8 de setiembre de 1988, a las 3 de la madrugada, ocho encapuchados uniformados ingresaron al domicilio de la técnica de enfermería dándole muerte a balazos. Ella era testigo clave de la matanza.

Los siguientes testigos asesinados fueron el alcalde de Cayara Justiniano Tinco García, Fernandina Palomino Quispe y el conductor del camión que los trasladaba, Antonio García Taype, junto con otros 11 pobladores el 14 de diciembre de 1988. Los tres fueron seleccionados por militares que interceptaron el vehículo y luego fueron ejecutados.

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