La reacción frente a la postura del Ministerio de la Mujer y el Ministerio de Educación, que se han pronunciado a favor del enfoque de género luego de que por meses no pudieran pronunciar la palabra “género” no ha sido recibida bien por los grupos antiderechos, muchos de los cuales ya amenazaron a los ministerios, sobre todo al de Educación, con enfrentarse nuevamente a ellos para, según estas personas, “acabar con el género” (¿?).
Este es el pronunciamiento que ha levantado de sus asientos a los antiderechos:
En el pronunciamiento señalan que defenderán la igualdad de género en el currículo de educación, lo que “permitirá desterrar patrones socioculturales como el machismo, que han legitimado, a lo largo de la historia, la violencia contra las mujeres y su postergación en distintos ámbitos del desarrollo”. Solo les faltó añadir que esos patrones socioculturales también han afectado a las personas LGTBIQ+ y a las personas racializadas.
Debido a ello, el colectivo antiderechos Con mis hijos no te metas, se mostró amenazante señalando que el Minedu no había “aprendido la lección”, refiriéndose a las constantes censuras que han enfrentado los ministros de Educación en el Congreso -estrategia política de los congresistas evangélicos y fujimoristas-, y anunciando entre líneas que será otro ministro el que pasará hasta que haya uno que defienda sus posturas anticientíficas y conservadoras.
Este chantaje fue retuiteado por el congresista evangélico Julio Rosas, cabeza de la campaña de desinformación de Con mis hijos no te metas.
El congresista evangélico, Juan Carlos Gonzales, también se pronunció contra las declaraciones del Minedu:
Así también, la congresista Tammy Arimborgo, mostró su desacuerdo con la nueva política del Minedu:
Con estas amenazas y disgustos que les ha ocasionado que los ministerios por fin se comprometieran con el enfoque de género, es probable que estén preparando nuevamente una censura a los ministros, y vuelvan a salir a las calles con sus mensajes desopilantes, como que el cuerpo de la mujer no le pertenece a la mujer o género nunca más.