Luego de que los asesinos de Solsiret Rodríguez confesaran su crimen y revelaran en dónde se encontraba su cuerpo, la mejor amiga de Solsiret, y principal impulsora de su búsqueda, Kathe Soto, reveló que el informe presentado por el Ministerio del Interior, y firmado por el ministro de ese tiempo, Carlos Basombrío, a pedido de la congresista Indira Huilca, que demostraba que no les interesaba ni un poco la desaparición de la joven.
En el “informe de investigación”, la policía señala que por información entregada por la pareja de Solsiret, Brian Villanueva, es decir, por el principal sospechoso, habían dado con una amiga de la joven y habían ido a buscarla a su casa, la que se encontraba en abandono, por lo que pasaron a buscar información sobre ella en facebook, y encontraron fotos de las dos jóvenes en el norte del Perú, por lo que suponían que ahí se encontraban. Las fotos eran anteriores a la desaparición de Solsiret, lo que demuestra no solo que no hubo ningún interés en dar con las huellas de Solsiret, sino que premeditadamente se realizó una “investigación” sin sentido, inútil, básica, sin ningún rigor ni lógica, propia de personas no preparadas en este tipo de temas,
Frente a ello, el exministro Basombrío ha respondido con suposiciones, y mencionó que le frustraba “no haber sido útil”. ¿De qué sirven sus lamentos en estos momentos? Tuvieron que pasar casi cuatro años para que reacciones frente al dolor de la familia de Solsiret. Para él el informe fue un trámite más, que firma sin siquiera revisar.
La excongresista Indira Huilca le refutó sus intentos de disculpas señalando que no solo fue incapaz, sino también indolente.
Ahora Basombrío asume toda su responsabilidad política, cuando ya no es ministro de nada, lo que ha generado indignación en la opinión pública. Los cuatro años atravesados por el dolor que vivieron Rosario Aybar y Carlos Rodríguez no podrán repararlos nunca.