- Para honrar la vida de Lucía Retoblo Espinoza de Muquiyauyo – Jauja, y exigir justicia y en defensa de las mujeres que quedamos.
Somos mujeres, madres, hermanas, hermanos, parejas, hijas, hijos, amigas, amigos, vecinas, vecinos, maestras, estudiantes, etc., de mujeres asesinadas. Somos muchísimas personas solidarias con el convencimiento de que ninguna mujer debe ser víctima de feminicidio.
Hoy, en el Valle del Mantaro, estamos conmocionadas y llorando el cruel asesinato de Lucía Retoblo Espinoza, madre adolescente de apenas 18 años, producido en el distrito de Muquiyauyo, Jauja.
Desde el día sábado 17 de mayo de 2025, este feminicidio cubre las portadas y titulares en los medios de comunicación, quizás en unos días estos desaparezcan y se desvanezcan, como sucedió con la voz de Lucía, víctima de todas las violencias, quien vivía en pobreza y violencia sexual, la misma que ya había denunciado.
Vivía una maternidad temprana, no deseada, vivía expulsada del sistema educativo, vivía o sobrevivía víctima de este sistema sin ser escuchada, acuerpada, defendida.
Vivía como miles de adolescentes y mujeres en nuestro país, donde la violencia feminicida nos arrebata la vida sin mayor remordimiento e incluso, en la mayoría de casos, sin alcanzar justicia acorde al horror de los hechos.
Ante el asesinato de Lucía Retoblo y honrando a todas las víctimas que le antecedieron, nosotras seguiremos en lucha hasta que obtengamos justicia, denunciando y exigiendo que:
1. El Estado peruano se responsabilice no solo en el papel, no solo cumpliendo protocolos, sino ejecutando acciones efectivas.
2. Existe en Muquiyauyo, Jauja, y en todo el país, las denominadas «instancias de concertación», que se supone son parte del «Sistema Nacional para la Prevención, Sanción y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres y los Integrantes del Grupo Familiar», establecido por Ley N° 30364. Y fue una de las instituciones de esta instancia donde ya se encontraban denuncias contra el padrastro agresor de Lucía. Creemos que no basta con «dictar medidas de protección» y dejar que la violencia continúe hasta la atrocidad del crimen a las mujeres, en este caso contra Lucía.
3. Exigimos que se evalúe y sancione a quienes teniendo la obligación de cumplir la ley y las funciones contra la violencia, se escudan en la realización de una actividad administrativa (emitir medidas de alejamiento, de asistencia médica) y no actuar con diligencia ante la amenaza y el peligro de las víctimas.
4. Exigimos también que se actúe con humanismo, sin discriminación de ningún tipo, que se proteja a las víctimas que han quedado con vida, la madre, las hermanas, los niños. Lucía no es una cifra más, tampoco una noticia, justicia para ella. Que el asesino pague su crimen.
5. Permaneceremos en lucha y atentas hasta que tengamos justicia, hasta que el Estado se responsabilice y actúe como es su deber ante la violencia feminicida y de género.
Este memorial es un acto de duelo, de amor y de lucha; hoy fue Lucía, mañana puede ser tu hija, tu hermana, tu madre, incluso puedes ser tú.
Llamamos a mujeres y varones en toda su diversidad a firmar este documento, como símbolo de solidaridad y compromiso. Que su nombre no se borre de la historia, que su memoria sacuda nuestra solidaridad y nos convoque a firmar.
https://forms.gle/21my85Xf86zvFWu58
Contra el feminicidio, contra la impunidad, por una vida digna y libre de violencia para todas.
Firmamos porque nos duele. Firmamos porque no es justo. Firmamos porque no es tarde para cambiar.
Huancayo – mayo 2025, en memoria de Lucía, 18 años, víctima de feminicidio