Diversos colectivos y organizaciones de la sociedad civil están uniendo sus fuerzas para evitar la posible presidencia de la candidata Keiko Fujimori, hija del dictador y condenado por crímenes de lesa humanidad Alberto Fujimori.
Bajo el lema ya histórico, pues los intentos de hacerse del poder del fujimorismo son de larga data, “Por memoria y dignidad, Fujimori nunca más”, el día viernes 30 de abril realizarán cuatro plantones en donde informarán a las y los ciudadanos sobre lo funesto que sería que un partido político investigado por organización criminal, gobierne el Perú.
Los plantones se realizarán a las 6 pm en Plaza San Martín, Plaza Bolívar (Pueblo Libre), Parque Kennedy, frente a la Municipalidad de Los Olivos, Plaza Huaycán y Carabayllo (Av. Merino Reyna con Av. Túpac Amaru).
¿Qué significaría el retorno del Fujimorismo al gobierno para el país? ¿Porqué deberíamos evitarlo?
Gisela Ortiz nos responde:
“Si el fujimorismo gana las elecciones significaría validar, como ciudadanos y ciudadanas, todo lo que hicieron como gobierno en los 90. Significaría no tener memoria y dignidad para volver a confiar en quienes hicieron del delito, una forma de hacer política. Tuvieron diez años para saquear al país, una década de corrupción, de violaciones a los derechos humanos, esterilizaciones forzadas, despidos arbitrarios y de implementación de un modelo económico que nos está matando en esta pandemia. Sin derechos básicos que atienda el estado, sin capacidad de respuesta. Significaría regalarles la oportunidad de limpiar el apellido Fujimori por encima de la memoria de nuestros muertos. Poder reescribir la historia, con todos los personajes nefastos de los 90, aquellos que tienen responsabilidades políticas en la impunidad y el encubrimiento de delitos.
No podemos darle la oportunidad a un partido autocrático, que no reconoce los crímenes y delitos de los 90 y que hace política sobre la mentira y el ataque a las víctimas.
Deberíamos evitar que llegue al poder porque el fujimorismo significa el crimen y el delito como forma de hacer política y ese mensaje no se debe permitir en un país doliente, en un país a 200 años de la declaración de la independencia; hay muchos hechos simbólicos que no podemos dejarlos en manos del fujimorismo y su forma de ejercer la política pisoteando instituciones y derechos ciudadanos. Este nuestro Perú, es también el país de las víctimas de los 90, de las víctimas de la pandemia; en memoria de ellos, no podemos votar por ningún Fujimori”.