“El día que a mí me demuestren que algún funcionario no ha cumplido con su deber y las órdenes que les hemos dado, yo no me aferro a ningún sillón ni a ningún cargo, porque los cargos no hacen a las personas”, declaró Luz Salgado cuando salieron las primeras investigaciones sobre la compra malversada de computadoras para el Congreso en su gestión como presidenta. Tres años después, la Primera Fiscalía Provincial Corporativa Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios se lo ha demostrado, pero la congresista aún no dice nada al respecto.
¿Qué fue lo que pasó? En 2016, una investigación de La República mostró que el Congreso había adquirido 980 computadoras con sobreprecio a una empresa fachada de Trujillo. El principal involucrado en esta malversación fue el exoficial mayor del Congreso, Jorge Cevasco (militante aprista). La Fiscalía pide para él 5 años de prisión por el delito de negociación incompatible.
La resolución fiscal señala que Cevasco, “en su condición de oficial mayor del Congreso, se interesó indebidamente en la compra de 980 computadoras de escritorio (…) en provecho de terceros, para lo cual ordenó que se hicieran nuevos informes y cambiar la cantidad de 269 a 980 unidades, aduciendo que existían computadoras desactualizadas y obsoletas”.
La Fiscalía también pide 5 años de prisión para el exjefe de la Oficina de Tecnología de Información, José Castro Paragulla. En el proceso también están comprendidos el exjefe del Área de Operaciones Eduardo Prieto Hernández y los funcionarios Fernando Flores Sifuentes, María Bravo Roncal, Sergio Romero Loyola, Rocco Romero Grados y Roberto Fajardo Saucedo.
