El expresidente del Congreso y expresidente de la República, el más breve en la historia del Perú, y que asumió gracias a un golpe de Estado congresal, Manuel Merino, ha decidido retomar sus actividades congresales como si sus decisiones políticas no hubieran finalizados en los asesinatos de dos jóvenes peruanos que, junto a miles más, intentaban salvar a la democracia de las ambiciones de poder de la ultraderecha encabezada por Antero Flores Aráoz.
La más mínima vergüenza le haría quedarse en su casa en estos pocos meses que aún le quedan en el Legislativo, pero al parecer eso es algo de lo que carece. Ni vergüenza ni arrepentimiento, y sus últimos tweets lo demuestran.
Ayer, 7 de diciembre, Merino regresó al Twitter, luego de sus dos últimas actividades en esta red social el 8 de junio y el 12 de noviembre, en pleno golpe de Estado:
Y regresó para seguir generando desestabilización y caos, sino porque soltaría una serie de mentiras, que pueden resultar hasta risibles sino fuera porque las suelta el que fuera presidente de facto del Perú por cinco días, y echado gracias al poder de las movilizaciones.
Su primer tweet luego del golpe es en contra de una exposición del Lugar de la Memoria y la Tolerancia, en donde se exhibirán fotografías de los hechos que acontecieron en la recuperación de la democracia que Merino había echado por la borda. Según el congresista, respalda la exposición, pero rechaza su contenido, intentando que la opinión pública crea que lo que hicieron los 105 congresistas golpistas fue constitucional.
Su segundo tweet fue para hacernos ver por qué el ministro del Interior tenía que salir inmediatamente de su cargo. Como muchos señalaron en redes, era el “terna” asignado al gobierno de Sagasti. Luego todos nos enteraríamos que intentó grabar a la primera ministra cuando esta lo citó para que le dé explicaciones sobre sus declaraciones. Si no estaba de acuerdo con el gobierno, ¿para qué Aliaga aceptó el cargo?
En su último delirante tweet señala que hay una oficina de IDL y del Partido Morado en el Ministerio del Interior, e incluso exige que se cite a la premier para explicar su teoría (¿?). A lo que el abogado Carlos Rivera, de IDL, le responde que prepare su defensa pues está en curso una investigación penal contra él.