Quería su libertad y Poder Judicial rechazó recurso de cese de prisión preventiva al presunto miembro de Los ‘Cuellos Blancos del Puerto’.

Juez Jorge Chávez Tamariz declaró infundado el recurso de cese de prisión preventiva de 36 meses que presentó el abogado de Jacinto Salinas Bedón, exmagistrado vinculado a la organización criminal ‘Los Cuellos Blancos del Puerto’.

No quería estar bajo la sombra

Recurso de la defensa de Salinas Bedón fue rechazado por el Tercer Juzgado de Investigación Preparatoria; exjuez es investigado por los presuntos delitos de organización criminal, tráfico de influencias y, alternativamente, por cohecho pasivo específico.

Además, se desestimó el pedido de Salinas porque está en prisión desde fines de julio del 2018 y solo ha pasado menos de un año desde que fue recluido. “No ha cumplido en proporción ni la mitad del plazo impuesto en 36 meses”.

Asimismo, la solicitud fue rechazada porque se encuentran actas de comunicaciones entre Jacinto Salinas y un litigante para que se declare nula una sentencia. Allí se hace mención también de una persona al que nombran ‘W’, del que la Fiscalía presume, podría tratarse de Walter Ríos.

Recordemos que, a finales de marzo de este año, Salinas Bedón había solicitado que no continúen las investigaciones en su contra. El pedido fue rechazado. Asimismo, hay que tener presente que Salinas fue detenido a fines de julio del 2018 junto con Antonio Camayo y otros exjueces.

Aquí un extracto de la conversación telefónica interceptada por Constelación (19 de septiembre de 2017); Eduardo Pérez Coronado, ‘Morote’, dialoga con Salinas acerca de un ‘pedido especial’:

Salinas: Hola, Eduardo ¿Qué tal, ¿cómo estás?

M: ¿Te acuerdas que te conversé de mi compadre “Lance” (Luis Muñoz Ramírez, reo en cárcel por homicidio y extorsión)? Papi, escúchame, él es mi pata. Es positivo (paga por los servicios), también.

S: Ah, ya.

M: Sabes que él no te va a comprometer en nada (…). La verdad que mi compadre a la firme quiere que lo apoyes. Es lo justo, tú sabes, por debajo de la mesa (…).

S: Sí, puede ser (…).

M: Más directo (…) ¿Se puede o no se puede?

S: Sí se puede.

M: Ya, yo solo tengo que decirle el precio, nada más. Lo que tú me digas.

S: El lunes ha habido audiencia, ¿no?

M: Sí. La firme es que él se quiere ir pe’. Se quiere ir (de la cárcel).

S: Ah, sí, claro, porque tiene otra más, dos (procesos judiciales) más.

M: Él me hizo una pregunta concreta, si tú puedes ayudarlo para que se vaya, ¿o no?

S: Claro, sí se puede (…). Voy a hablar con la persona indicada y a las 12 me vuelves a llamar.

M: Ya, viejo, hazlo de una vez. Mi compare tiene que salir. Es reservado, tú no vas a hablar con nadie, solamente conmigo.

S: Ya, contigo. Tú eres la garantía.

M: Al mediodía hablamos. Ahí te mando tu botella de whisky.