La Organización de las Naciones Unidas se unió a diversas instituciones, organizaciones y universidades, y mostró su preocupación por la amenaza al orden constitucional que está haciendo el Congreso al intentar destituir a los miembros del Jurado Nacional de Justicia inventándole faltas graves que no existen.

Debido a este comunicado, en donde la ONU señala rotundamente que la separación de poderes es un principio fundamental de la democracia, y que solo respetando este principio se puede garantizar y consolidar una sociedad justa y democrática para el beneficio de todos.

Claramente este pronuncimiento no cayó para nada bien en el Congreso, y los miembros de la Comisión de Relaciones Exteriores, en afán de venganza, exigieron que la ONU retire a su coordinador residente, Igor Garafulic, por, según ellos: “este señor ha demostrado intromisión en asuntos internos de Estado, usurpando y arrogándose funciones que no le competen, dentro de la Organización de las Naciones Unidas y, sobre todo, que se ha generado una situación a pocos días de la presencia de la reunión a la cual va a acudir nuestra presidenta“.

Los miembros más enfurecidos por el comunicado fueron María del Carmen Alva, que pidió el retiro del representante de la ONU, y el fujimorista Alejandro Aguinaga, quien pidió declarar persona no grata a Garafulic.

“Personajes de esta naturaleza no requerimos aquí que vengan en representación de organismos tan importantes como Naciones Unidas, para que vengan a violentar el respeto la independencia de poderes, el respeto al marco constitucional”, manifestó Aguinaga, con el fin de que el Congreso siga violentando el respeto a la independencia de poderes y al marco constitucional.