Pedro Suárez Vertiz, nuevamente se convirtió en noticia y en parte del repudio de la opinión pública (nunca falta quién le aplauda tampoco), luego de publicar un mensaje racista y clasista en su cuenta de Facebook.

El mensaje hacía alusión a los cientos de peruanxs que no obedecen las órdenes del Estado, dadas con el fin de evitar la propagación del coronavirus, pero está dirigido a una parte de la población, a la que él cree que el mensaje no le llega bien, a las clase populares, que él asume que son brutas, y para que entiendan, Pedro escribe como supone que escriben ellos, o sea, mal, y en ese intento destila todo su desprecio hacia lxs peruanxs que no han accedido ni a la educación ni a los privilegios que él si tuvo a disposición.

Suárez Vertiz asume que si hablas de determinada manera, es decir, mezclando el castellano y el quechua, entonces también eres irresponsable, negligente y no obedeces las reglas.

Siglos de colonización nos han enseñado y nos han hecho interiorizar este tipo de pensamiento sobre las personas quechuahablantes, sus descendientes, y las diferentes formas lingüísticas que usan al hablar castellano: que no tienen las suficientes capacidades cognitivas, que no son inteligentes, que son brutas y que son feas. Lo que hace Suárez Vertiz es repetir esa información sin ningún cuestionamiento de su parte, refrendándola y perpetuándola para mantener a determinada población en situación de inferiorización.

Así, como inferiores, es más fácil burlarse de ellos, quitarles oportunidades, perseguirlos, encerrarlos, suprimir sus derechos y matarlos. Así, como inferiores, es más difícil que protesten, que exijan, que pidan salud educación, vivienda y calidad de vida.

Suárez Vértiz añora el país que éramos hace unos siglos en donde era posible agarrar a latigazos a quienes desobedecían la ley, pero solo si eran mestizos, cobrizos, serranos, indígenas, afroperuanos. A todos los demás se les perdonaba, pues el color de la piel era la marca indubitable del buen o mal trato que debían recibir las personas.

Demasiados ejemplos tenemos de gente pudiente desacatando las órdenes del gobierno, ¿por qué Pedro Suárez Vertiz no se dirige a ellos? ¿Por qué no se burla de ellos como se burla de las personas que hablan dialectos más cercanos al quechua? Porque el poder, la hegemonía, la blancura, tiene graves problemas para mirar más allá de su ombligo. Pedro no ve más allá de su desprecio, de su racismo, de su clasismo, y por eso es un personaje del pasado, porque representa al pasado. Eso hay que tenerlo siempre presente.