Roman Polanski fue el ganador del Premio César 2020 a mejor director de cine por la película “El acusado y el espía” y varias actrices mostraron su disgusto a este reconocimiento, pues el cineasta francopolaco ha admitido haber abusado de una adolescente de 13 años en Estados Unidos en 1977, razón por al cual no puede volver a poner un pie en ese país pues iría preso.

Sobre Polanski recae otra denuncia de violación contra una modelo de 18 años en 1975, situación que renovó los ánimos de protesta de las feministas contra los continuos premios que sigue recibiendo a pesar de ser un condenado por violación.

“Lo que pasará esa tarde se sabe de antemano. Los activistas ya me están amenazando con un linchamiento público. Algunos anuncian manifestaciones frente a la Sala Pleyel. Otros planean convertirlo en una plataforma de combate contra una dirección del festival desprestigiada. Promete parecerse más a un simposio que a un festival de cine”, manifestó Polanski, por lo que no se presenta a ninguna de las galas en donde deciden premiarlo.

Las actrices Adèle Haenel y Noémi Merchant, así como la directora Céline Sciamma decidieron retirarse del evento en señal de protesta. Adèle, quien denunció al director de cine Christophe Ruggia de haber abusado de ella cuando tenía 12 hasta los 15 años, mostró su rechazo exclamando “¡Viva la pedofilia!, ¡bravo la pedofilia!”.