Ante las desafortunadas declaraciones del Primer Ministro Aníbal Torres sobre los supuestos sabotajes al oleoducto por parte de personas de las naciones originarias, jóvenes líderes wampís decidieron responder de manera creativa a ese bulo que, gracias a las campañas racistas emprendidas durante décadas por las empresas petroleras, está enquistado en las creencias populares. Sin embargo, el informe de “La Sombra del Petroleo”[1], publicado en 2021, concluye que el 75% de los derrames entre 1997 y 2021, fueron ocasionados por corrosión y fallas operativas.

Los jóvenes se encuentran en la comunidad nativa de Soledad, en el río Kanus (Santiago), en Amazonas, realizando un taller de creación de música urbana con el objetivo de reivindicar su idioma y transmitir sus mensajes sobre la importancia del cuidado del territorio Amazónico. Fue en medio de dicho taller que llegó la noticia sobre las declaraciones del Primer ministro, lo que les generó indignación y determinó a responder. En el mensaje musical también se escucha al sabio Roman Yankur, experto en música tradicional wampís, quien hace énfasis en la exigencia de que los derrames sean remediados.

Tras las penosas declaraciones del Primer Ministro, el Gobierno Territorial Autónomo de la Nación Wampís emitió también un pronunciamiento[2] donde exige su rectificación y la atención pronta a los reclamos de las naciones amazónicas afectadas por los derrames en las últimas semanas.

Como se sabe, los recientes derrames del oleoducto norperuano en la región Loreto están ocasionando daños irreparables en las aguas y territorios indígenas, lo que ha obligado por un lado a los hermanos y hermanas Kukama-Kukamiria, Urarina, Achuar, Kichwa y Quechua de la plataforma de PUINAMUDT a realizar una minga por sus derechos (vulnerados más de 50 años por la industria petrolera), y a dirigentes de otras nacionalidades indígenas, como los hermanos y hermanas Chapra, a movilizarse hasta Lima para que sus reclamos históricos por la afectación petrolera sean atendidos.

Precisamente, el derrame ocurrido el 10 de setiembre, a la altura del km 177+670 del Ramal Norte del Oleoducto Norperuano, dentro del territorio de la comunidad nativa de Mayuriaga, en territorio Wampís, y que está afectando también el territorio de la Nación Chapra, aún no ha sido atendido de manera adecuada y articulada con las autoridades de las comunidades afectadas a lo largo del río Morona. Ello a pesar de que el GTANW enviara el 27 de setiembre un oficio a OEFA, OSINERGMIN y otras instancias estatales exigiendo, entre otros puntos, que las acciones de limpieza y remediación se realicen en coordinación con las autoridades comunales.


[1] https://observatoriopetrolero.org/wp-content/uploads/2022/04/La-sombra-del-petroleo-Aymara-Leon-y-Mario-Zu%C3%B1iga-PUINAMUDT.pdf

[2] https://nacionwampis.com/pronunciamiento-en-respuesta-a-las-declaraciones-del-primer-ministro-sobre-los-derrames-en-la-amazonia/