La posible prisión preventiva de Keiko Fujimori, que se decidirá este miércoles, hace que las caras visibles de la Fuerza Número 1 empiecen a planear la estrategia para no hundirse con ella. Desde que fue a prisión por unos días, hemos visto renuncias, licencias temporales, pasos al costado, abandono de cargos y la negación incluso de conocerla, pertenecer a su partido o ser su amiga.

A la renuncia de Francesco Petrozzi el 20 de octubre señalando que no tenía independencia en Fuerza Popular y que tenía miedo de hablar, por lo que calló 6 meses luego de felicitar al exministro de Cultura Jorge Nieto, se suma la licencia temporal pedida por el presidente del Congreso, Daniel Salaverry, quien sostuvo que esta era una manera de tener neutralidad frente a lo que se avecina al partido naranja. 

Las voceras, de FP Úrsula Letona, Karina Beteta y Alejandra Aramayo también pusieron sus cargos a disposición, y ahora último, el congresista Rolando Reátegui, sindicado como el lavador de dinero de FP en la región San Martín niega ser de este partido y retiró su foto con Keiko de su cuenta de twitter, lo que le fue reclamado por la cuenta de Jóvenes de Fuerza Popular.

A Reátegui se le sindica como el testigo protegido que está dando toda la información a la Fiscalía sobre el caso Cócteles. Las sospechas fueron levantadas por la misma Keiko Fujimori al señalar que no veía hace tiempo a Reátegui y que no la fue a visitar a donde estaba detenida. 

¿Estarán rearmando el partido sin Keiko Fujimori como líder de este?