En febrero de este año, a puertas de empezar el año escolar, se anunció la implementación del Plan de Protección y Seguridad Escolar 2019 en el Callao. Este plan piloto incluye la incorporación de un policía en 20 colegios del Callao para “impartir valores, prevenir la violencia y colaborar con directores y profesores en la difusión de valores cívicos”.

Según el coronel PNP Javier Pedreras, en declaraciones para el Diario Correo, “el piloto consiste en asignar un efectivo policial en los colegios seleccionados con la finalidad de evitar casos de violencia entre los niños, violencia por parte de su entorno familiar o de otra persona, para detectar casos de bullying o consumo de drogas, entre otros“.

Frente a estas acciones, Mano Alzada consultó con dos especialistas en temas de educación y desarrollo para que nos dijeran si estas medidas son correctas y si realmente servirán a los objetivos que buscan. Esto es lo que nos dijeron:

Susana Frisancho, Doctora en psicología del desarrollo y Profesora principal del Departamento de Psicología PUCP

“Es un absurdo partir de la idea de que los valores se imparten, más allá de quién sea la persona encargada de hacerlo. Por supuesto, no creo que la policía sea la adecuada para llevar a cabo labores educativas, eso le corresponde a los docentes, porque se requiere de formación especializada para saber conducir un proceso educativo. La policía no la tiene. Más allá de ello, está propuesta parte del supuesto de que los conocimientos se transmiten de una persona a otra, cosa que es falsa, los conocimientos (y los valores no son la excepción) se construyen y se reorganizan en la mente de cada persona, en interacción con su medio. Nadie imparte ni transmite nada a nadie.

Tener sistemas disciplinarios exclusivamente punitivos no sirve. Lo que la escuela debe hacer es centrar su atención en el desarrollo de todas aquellas capacidades que permiten a las personas razonar sobre lo justo y lo injusto, ponerse en el lugar del otro, pensar en sistemas articulados y no en factores disociados, integrar la propia identidad con metas morales. Todo esto es lo que hará que la propia persona regule su comportamiento y pueda cooperar con los otros para una convivencia justa y democrática”.

Milagros Vidal, licenciada en Educación

“Al parecer, quienes están haciendo esta propuesta han descartado por completo el papel del maestro y de la familia como los principales agentes de enseñanza de los estudiantes. Es decir, ¿cuál es la función de un policía? Proteger a la ciudadanía de la delincuencia, entonces ¿qué hace en la escuela? Pues lo que los padres ni maestros han podido hacer. Hay cientos de estrategias pedagógicas para trabajar valores de manera transversal en todas las áreas. Lo que lleva a pensar que un policía lo va hacer mejor es el temor que ejerce una educación castrense, que es, en muchos casos, lo que los padres ansían, porque no pueden manejar la disciplina en casa y consideran que una propuesta educativa en valores impartida o fomentada desde los colegios no los involucra y que se requiere ‘mano dura’ representada en la imagen de un policía. Eso de los valores es una excusa, si quieren poner un policía a enseñar debería ser para enseñar defensa personal o cómo prevenir o detectar situaciones de riesgo”.

Policías y enfoque de género

Creer que un policía es igual a valores es como creer que un cura es igual a bondad o un político es igual a principios, solo por la autoridad que ostentan, y ese es un gran error. Justamente una problemática que atraviesan las mujeres y las personas lgtbi en general desde siempre es la incapacidad de la policía para entender la diferencia de trato que hay entre hombres y mujeres/lgtbi, por lo que muchas mujeres que han denunciado violencia en una comisaría alguna vez se han visto enfrentadas al espíritu de cuerpo de los policías con los agresores, justificando la violencia que se cometía contra ellas y revictimizando aún más a las sobrevivientes. Si no se puede evitar que haya policías en los colegios, mínimo tienen que tener capacitación en enfoque de género, porque “suponemos” también que estos policías serán hombres, si la idea es imponer autoridad y hacer creer que se tienen valores per se, entonces las mujeres policías están descartadas de esta ecuación.

Intentamos comunicarnos con la Dirección Regional de Educación del Callao pero no nos dieron razón. En el Minedu nos dijeron que no contaban con información sobre el tema.