La comunidad peruana radicada en la zona Tri-Estatal (NY/NJ/CT), junto a compatriotas de otras ciudades de EE.UU. y aliados locales, realizó una protesta en rechazo al Gobierno de Dina Boluarte, presidenta del Perú. La manifestación surge en el marco de la visita de la mandataria a las Naciones Unidas en Nueva York y su intervención en la “Cumbre Sostenible de Líderes de la Alianza del Pacífico 2023”, programada para el 20 de septiembre. La concentración se realizó frente al edificio de la CFA Society, sede del evento.

Los manifestantes expresaron su oposición a la administración de Dina Boluarte, citando un historial alarmante de violaciones a los derechos humanos en el Perú. Estas violaciones abarcan desde masacres y la reiterada suspensión de los derechos civiles con connotaciones racistas, hasta un marcado declive en las prácticas democráticas del país. 

Informes de la Oficina de la Defensoría del Pueblo indican que 67 peruanos fallecieron en el marco de las protestas antigubernamentales que comenzaron en diciembre pasado durante la gestión de Boluarte. Es especialmente preocupante la muerte de 49 indígenas y habitantes de zonas rurales a manos de la Policía y el Ejército del Perú. Las autopsias confirman que la mayoría murió por impactos de munición de las fuerzas estatales. A la fecha, ningún oficial ha sido detenido por estos hechos. 

La concentración aspiró a reflejar el descontento en el Perú, donde el 79% de la población desaprueba la labor de Boluarte y un 80% exhorta a elecciones anticipadas. La cuestionada legitimidad de las autoridades se evidencia también en el rechazo hacia el Congreso, que ostenta una aprobación del 6%, la más baja en toda la región.

Asimismo, los organizadores desean resaltar la ilegalidad del viaje de la presidenta y la tendencia de su administración a transgredir el Estado de Derecho. El Congreso, en complicidad con el Ejecutivo, promulgó el pasado junio una ley ad-hoc permitiendo a #DinaAsesina dirigir el país “de forma remota” desde el extranjero, lo cual contraviene el artículo 115 de la Constitución. Esto demuestra cómo la Constitución, promulgada durante la dictadura de Alberto Fujimori, es interpretada de manera maleable, siendo una de las raíces de la inestabilidad política en el Perú. Por esto, la demanda de una nueva Constitución resuena entre las mayorías del país.

Con esta concentración se quiso generar conciencia sobre la crisis política y social en el Perú. Mediante este acto se buscó impulsar a la comunidad internacional a solidarizarse con el pueblo peruano en su lucha contra un régimen que amenaza no solo la estructura democrática, sino también la integridad y el bienestar de sus ciudadanos.