El exdirigente de la Federación Peruana de Fútbol, Edwin Oviedo, irá a juicio oral este 6 de marzo por el asesinato del dirigente azucarero Percy Farro, a manos de “Los Wachiturros de Tumán”, organización criminal que presuntamente también fue dirigida por Oviedo.
Edwin Oviedo era uno de los directivos de Agroindustrial Tumán como parte del Grupo Oviedo, que administraba esta empresa azucarera. Para hacerse del control total de ella, utilizaron a una banda criminal que la policía llegó a denominar “Los Wachiturros de Tumán”, que se encargaba de asesinar a dirigentes considerados “problemáticos” para los intereses empresariales del Grupo Oviedo.
Cuando el Ministerio Público empezó a investigar los nexos entre el Grupo Oviedo y Los Wachiturros de Tumán, por los delitos de asociación ilícita para delinquir, homicidio calificado, robo agravado con subsecuente de muerte, cohecho pasivo propio, tenencia ilegal de armas, peculado, entre otros, se llegó a detener a parte de la banda, pero los altos dirigentes eran librados de culpa continuamente y ni siquiera detenidos.
El 2005, Martín Castañeda Salazar, juez titular del Séptimo Juzgado de Investigación Preparatoria de Chiclayo, declaró improcedente el pedido de detención del presidente de la Federación Peruana de Fútbol y dueño del Grupo Oviedo, Edwin Oviedo Picchotito, así como del administrador judicial de la azucarera, Segundo Ordinola Zapata, y de los funcionarios Cecilia Limo Rojas, Pablo Roberto Arce Benítez, Antero Díaz Cieza y Julio Odino Medina Pazzarra.
Cuando se descubrió que el Poder Judicial estaba manejado por “Los Cuellos Blancos del Puerto”, toda la maquinaria que mantenía en la impunidad a Edwin Oviedo también se vino abajo. Hoy, en prisión preventiva, está siendo procesado por el crimen del que lo libraban continuamente jueces corruptos: el asesinado del dirigente azucarero Percy Farro.
Los asesinatos de Los Wachiturros de Tumán por órdenes del Grupo Oviedo
Segundo Felipe Camacho Argandonia, asesinado el 30 de setiembre de 2012 cuando se dirigía a su vivienda situada en la calle Real, en el anexo de Calupe.
Manuel Peralta Silva, asesinado en su domicilio.
Manuel Rimarachín Cascos, recibió tres disparos de un sujeto en moto el 12 de octubre de 2012.
Rafael Mechán Ballena, asesinado el 16 de octubre de 2014.
Percy Waldemar Farro Witte, asesinado el 13 de mayo de 2015, cuando perifoneaba arengas a favor de la huelga general indefinida de los trabajadores.