Debido al desembarco de prestigiosas escritoras a la FIL Guadalajara, algunos de los escritores que quedaron en la lista que participará en esta ventana cultural han empezado a renunciar en solidaridad con los que han sido retirados, sobre todo con Gabriela Wiener, Katya Adaui y Karina Pacheco.

Entre los renunciantes se encuentran Juan Carlos Cortázar, Mariana de Althaus, Micaela Chirif, Rafael Dummett.

Renuncia de Juan Carlos Cortázar

El Ministerio de Cultura acaba de excluir de la delegación a la FIL Guadalajara a escritoras y escritores muy relevantes en la literatura peruana actual. No se manifiestan criterios ni argumentos, mas allá de la búsqueda de una representatividad territorial, que es un criterio de por sí muy pobre para organizar políticas culturales o actividades puntuales como esto de la delegación. Más allá de los detalles, queda cada vez más clara la forma torpe y simplona como la actual gestión ministerial del MINCUL piensa orientar las políticas culturales. Si así, de manera tan poco transparente y sin criterios sobre la mesa, excluyen a personas tan relevantes del quehacer literario nacional, tiemblo al pensar como se manejarán cosas más complejas como los estímulos a la cultura. No me siento cómodo en una delegación así, para ser honesto. No me siento cómodo, además, con el maltrato a escritoras y escritores que leo y, a algunas, conozco y quiero personalmente. Que alguien más ocupe el espacio nomás.

No hay ninguna descripción de la foto disponible.

Renuncia de Mariana de Althaus

Con mucha pena, me veo en la obligación de renunciar a participar en la delegación peruana que irá este año a representar al Perú como país invitado a la Feria Internacional del Libro de Guadalajara 2021. No quiero ser parte de un grupo se ha conformado siguiendo criterios inaceptables y que agreden la carrera de nueve escritores de altura y trayectoria, principalmente la de tres importantes escritoras como Gabriela Wiener, Katya Adaui Sicheri y Karina Pacheco Medrano.

El Ministerio de Cultura del Perú ha invitado y luego desinvitado a nueve escritores prestigiosos, obedeciendo criterios incomprensibles, con el argumento de dar oportunidad a otros escritores que no han participado en ferias. El objetivo de la participación de un país como invitado en una Feria como esta es ofrecer una delegación de la mejor calidad posible para promover a sus escritores y a su industria editorial. Un grupo de funcionarios del Estado ha trabajado duro durante años para conseguir esta invitación de la FIL Guadalajara, la feria literaria más importante de Latinoamérica, dentro de una competencia reñida con muchos otros países, y ahora debe ver con desconcierto que su esfuerzo puede haber servido para nada.

Me apena y preocupa la ignorancia que está demostrando del Ministro Ciro Gálvez – que claramente no está en ese puesto por razones meritocráticas – sobre el sector editorial y sobre la importancia de un evento como este, además de la actitud destructiva que le impide asesorarse y tomar una decisión que beneficie a la golpeada industria editorial y a nuestros escritores. Me apena también mi país, que pese a todo tiene escritores y escritoras de primer nivel (que ya nos representaron maravillosamente en la FIL Bogotá hace algunos años) y podría hacer un papel digno en el año de su Bicentenario a pesar de la limitación presupuestal. En tercer lugar, me apena todo el trabajo de los organizadores y el desprecio que se dirige a los escritores que han construido una carrera sólida durante años. Y por último me apena porque para mí era un honor y una gran responsabilidad ser parte de la delegación, a pesar de no ser narradora, como representante de la dramaturgia peruana en un momento tan difícil para el país, para los que nos dedicamos a la cultura, y especialmente para el teatro.

Incluir a escritores desconocidos que nunca han participado en una feria internacional puede ser muy bueno, si se demuestra que tienen el mérito suficiente, por supuesto que sí. Pero sacar a escritores con trayectoria y méritos probados para que participen los otros es una burla a todos los peruanos y un golpe más a la cada vez más débil meritocracia peruana. Pero lo más indignante para mí, como mujer, es que saquen justo a las que hoy son probablemente las tres narradoras mujeres más importantes de su generación, que encima son de los pocos escritores de la lista que acaban de publicar en un contexto internacional e iban a presentar sus libros en la plataforma de la feria. Ellas han labrado sus carreras sin ayuda del Estado, y han construido su prestigio en contra de un contexto cultural misógino y adverso como el nuestro. Resulta doloroso y desalentador que ahora el Estado las agreda a ellas, y con ellas a todas las peruanas.

Renuncia de Rafael Dumett

Fui invitado por el Ministerio de Cultura del Perú a participar de la delegación que participará en la Feria del Libro de Guadalajara en su edición de este año. Después de las declaraciones del ministro Ciro Gálvez en el sentido de que la delegación se modificaría, un representante del ministerio se comunicó con nosotros los invitados peruanos para señalarnos que esta modificación simplemente incluiría a nuevos escritores excluidos por la anterior convocatoria. Algo que me pareció inclusivo, necesario y saludable. Ayer, al ver la nueva lista, que excluye sospechosamente a una historiadora y a tres importantes escritoras peruanas, una de ellas una gran escritora cusqueña con obra brillante y reciente, he decidido desistir de mi participación.

Renuncia de Micaela Chirif

En solidaridad con quienes han sido excluidxs sin justificación alguna, renuncio a participar de la delegación peruana en la Fil Guadalajara. Si el ministro Ministerio de Cultura del Perú quiere un país inclusivo, lo que tiene que hacer es democratizar el acceso al libro en todas las regiones del Perú (no va por buen camino dejando prácticamente descabezada a la Biblioteca Nacional del Perú) y apoyar el desarrollo de la industria editorial en todas las lenguas que se hablan en nuestro territorio. El problema de fondo es de políticas públicas, no de listas. Este es solo un gesto vacío y populista que muestra un razonamiento muy pobre.

Renuncia de Alonso Cueto

Las medidas tomadas por el ministro de cultura respecto a la delegación de escritores del Peru a la feria de Guadalajara me parecen absurdas y discriminatorias. He renunciado a mi participación en la feria por ese motivo. Esperemos que aparezcan otras autoridades para la promoción de la cultura.

Renuncia de Victoria Guerrero

Expreso otra vez mi solidaridad con las y los escritores des-invitados a la #filguadalajara por el Ministerio de Cultura del Perú. Ayer recibí mi segunda carta de invitación. Siendo Premio Nacional de Literatura renuncio a la invitación y a ser parte de este maltrato.

Si quieren escritorxs de regiones, denles las armas e investiguen. No hagan populismo de última hora. Las escritoras la hemos peleado para estar aquí y nos ha costado mucho.