La congresista Indira Huilca mostró su satisfacción al aprobarse y publicarse, por fin, en el Diario Oficial El Peruano, los cambios al Código Penal en lo que respecta a los delitos contra la libertad. Recordemos que hasta ayer el presidente Martín Vizcarra podía firmar por insistencia la aprobación del Proyecto de Ley  N° 1396, que impedía que los delitos por violación sexual prescriban y otorgaba mayores garantías a las mujeres para ser protegidas cuando recibían algún tipo de violencia de este tipo.  

Huilca, principal promotora de estas reformas, señaló que eran el “triunfo de miles de mujeres en nuestro país, quienes los últimos años se han movilizado exigiendo justicia para las víctimas de la violencia machista. ¡Sigamos luchando! #NiUnaMenos”. 

La campaña de las organizaciones y activistas feministas, bajo el hashtag #ElDañoNoPrescribe, también fue vital para lograr esta tarea. 

Les dejamos sus comentarios a la promulgación de la ley: 

“Hoy se publicó en el diario El Peruano la #Ley30838, Ley que reforma de manera integral la sanción a los delitos sexuales. Esta reforma es una de las más importantes de los últimos años porque no solo se trata de un aumento de penas, sino que modifica al menos 12 aspectos de la regulación de estos delitos. 

Uno de los cambios más significativos que proviene del proyecto 2070/2017 de mi autoría, señala la falta de libre consentimiento como elemento determinante para considerar la violencia sexual como delito. Del proyecto 1069/2016 se aprobó la imprescriptibilidad en todos los delitos sexuales, estándar que hoy está vigente solo para casos de corrupción de funcionarios.

Esto es un giro profundo en el sistema de justicia que suele no amparar los testimonios de las víctimas si no se presentan evidencias de daños físicos. Ahora, se considera como delito aquel acto sexual sin CONSENTIMIENTO. Asimismo, desde ahora los delitos sexuales no prescribirán. Las mujeres y quienes fueron víctimas de violencia sexual podrán buscar justicia en cualquier momento.

Un elemento importante de esta reforma es la eliminación de la disparidad de sanciones entre los delitos sexuales contra menores de 14 años y las personas mayores de esa edad. Actualmente, la pena en el primer caso va entre los 35 años y la cadena perpetua, pero las violaciones a mujeres mayores de edad tienen una pena solo entre 6 y 8 años.

Otro cambio sustancial es que se considera como agravantes el registro de la violencia sexual a través de medios audiovisuales y/o su difusión en los medios de comunicación; y si el agresor tiene presencia de alcohol o drogas.

Este es un triunfo de miles de mujeres en nuestro país, quienes los últimos años se han movilizado exigiendo justicia para las víctimas de la violencia machista. 

¡Sigamos luchando!

#NiUnaMenos”.