Luego de que el presidente de Chile, Sebastián Piñera, le diera carácter de urgencia al debate legislativo del Matrimonio Igualitario, dándole la espalda a sus aliados políticos conservadores, el Senado votó el 21 de julio por separado la aprobación del matrimonio, con 28 votos a favor y 14 en contra, y la aprobación de los derechos filiativos, con 29 votos a favor y 14 en contra.
Fueron cuatro años de debate y bloqueos de los sectores conservadores que se oponían a la ley pues señalaban que ya habían Unión Civil, los que han quedado atrás luego de la aprobación del Senado.
La Unión Civil, aprobada en 2015, no permitía el derecho a filiación, por lo que los hijos de las parejas de lesbianas y gays no podían ser reconocidos como parte del núcleo familiar.
El siguiente paso es la aprobación por la Cámara de Diputados, y si todo resulta a favor, Chile se convertiría en el octavo país latinoamericano que permite el matrimonio entre personas del mismo sexo, junto con Argentina, México, Brasil, Colombia, Ecuador, Uruguay y Guayana Francesa, Bolivia tiene Unión Civil, Perú, nada.