Ana Ruth Silva, exesposa del conocido doctor de la farándula, Tomás Angulo, reveló en un programa dominical que el psicólogo solo le pasa una pensión de 400 soles a su hijo, a quien no visita, ni suele mostrar interés por el adolescente. 

Frente a esta denuncia, Angulo respondió que nunca reconoció al niño, ni lo quiso ni quería estar con él. Asimismo, ambos se acusan de infidelidades que ocasionaron la separación, pero luego de esta, el psicólogo se desentendió completamente del niño, quien actualmente tiene 13 años. 

“Cayó la bomba y desaparecieron todos. Y nunca más, ni su padre, ni su madre llamaron para preguntar si mi hijo vivía”, señaló Ana Ruth. Así también, manifestó que Angulo quiso tener la tenencia del niño iniciando un proceso legal para que el niño viva con él de 6 meses a un año y que ella le pague 400 soles mensual, a pesar de no quererlo. 

El Poder Judicial ordenó que Angulo entregue una pensión mensual de 850 soles. 

Pero eso no es lo peor, sino el hecho de que haya salido en los medios señalando no querer a un niño para justificar la irresponsabilidad de pasarle una miseria. ¿Qué gana Angulo señalando que no lo quiere ni lo quiso si sobre eso no se trata la denuncia, sino de no cumplir con sus deberes como padre y hacerse responsablemente económicamente si emocionalmente no puede? 

Así abundan padres biológicos o adoptivos que luego de tener hijos rechazan cumplir con sus deberes y son las mujeres las que terminan asumiendo toda la carga emocional y económica que implica cuidar a una persona. Es importante que se haga responsable sin seguir revictimizando al niño.