El ministro del Interior, Carlos Morán, ha sido invitado este miércoles 10 de junio, por segunda vez, a la Comisión de la Mujer y Familia, presidida por Tania Pariona, para responder sobre la presunta red de pornografía infantil en la Policía Nacional, y sobre uno de los últimos casos de feminicidios ocurrido en el Callao, el de Erika Oblitas Morales.

En el caso de Erika, se han conjugado una serie de negligencias de parte de la policía y el poder judicial para ocasionar su muerte. El 2 de junio, en la madrugada, Erika estaba siendo golpeada por Miguel Antonio Benites, su expareja, quien, en el momento más álgido, le golpeó la cabeza con un televisor. En medio de la pelea fueron ambos detenidos por la policía, pasando por medicina legal y determinando “agresiones mutuas”, sin considerar que de ninguna manera las agresiones de un hombre contra una mujer son equivalentes a cuando se da la situación inversa. Ellos fueron detenidos y Erika pasó 8 horas en la comisaría antes de empezar a convulsionar siendo trasladada al hospital en esos momentos, entrando en coma por siete días y muriendo el 10 de junio. Miguel Benites fue liberado dos días después por el fiscal Julio Odón García Romero, quien tiene a su cargo la Fiscalía Especializada en Violencia Contra la Mujer del Callao, y a quien se le ha abierto una investigación.

Hasta el momento han ocurrido cerca 79 feminicidios, 13 de ellos en junio, 4 de las mujeres asesinadas fueron menores de 18 años, ellas dejan 10 niños huérfanos.