Eso es lo que se pudo ver ayer en la Comisión de Defensa del Congreso presidida por el aprista Jorge del Castillo, en el interrogatorio a los integrantes de la División de Investigación de Delitos de Alta Complejidad (Diviac), quienes fueron sometidos a preguntas sin sentido y a diversas faltas de respeto por parte de los congresistas fujimoristas y apristas.
¿El motivo? El suicidio de Alan García. A como dé lugar, los congresistas fujiapristas querían demostrar que la policía había incurrido en errores al momento de realizar el procedimiento de detención preliminar ordenado por la Fiscalía, que tenían motivaciones políticas o que la culpa del suicidio de García era de Vizcarra, la Fiscalía, la policía, Odebrecht y las redes sociales, en ese orden.
Las preguntas buscaban cuestionar la experiencia, la pericia, el conocimiento e incluso los estudios de los policías que estuvieron presentes minutos antes de que el expresidente Alan García se disparara en la cabeza para no responder ante la justicia. Cuando se les hizo notar que les estaban faltando el respeto, rápidamente saltaron a responder que siempre han defendido a la policía, incluso mencionaron a “la vieja confiable”: el terrorismo, pero el ataque era evidente, querían dejar mal parado al equipo policial.
El congresista Carlos Tubino llegó a decir que los miembros policiales eran una “policía política” y que la celda de la Prefectura de Lima era una “mazmorra”, por lo que el Instituto de Defensa Legal de la Policía lo amenazó con denunciarlo si no mostraba pruebas sobre lo afirmado.
“Tengo el agrado de dirigirme a usted(…) con la finalidad de hacer de su conocimiento el malestar que vienen causando sus difamatorias declaraciones durante la sesión de la Comisión de Defensa, en la cual señaló que la DIVIAC se había convertido en una Policía Política que tenía una mazmorra en la Prefectura de Lima, lugar donde se presiona psicológicamente a los detenidos para facilitarle el trabajo a la Fiscalía”, señalan.
“Los desatinados comentarios no solo mellan el honor y buena reputación de los integrantes de la Diviac, sino de todos los miembros de la PNP”, manifiesta el comunicado y exigen que “a la brevedad cumpla con presentar los medios probatorios que acrediten tal información o en su defecto, sírvase a ofrecer las disculpas correspondientes, caso contrario procederemos con las acciones legales”.
Ni corto ni perezoso, Tubino salió a desdecirse y disculparse por los agravios: “Lo que estoy diciendo claramente es que la posición que siempre ha tenido Fuerza Popular es de respaldo, apoyo permanente a la Policía Nacional del Perú. El día de ayer hemos tenido una sesión tensa, pero ahí queremos manifestar que […] si alguien de la Policía Nacional se ha sentido ofendido por nuestras palabras, las disculpas del caso”.
“La palabra ‘mazmorra’ la retiramos, pero por otro lado decir que la Diviac hace un trabajo excelente contra la lucha contra el crimen organizado en nuestro país, merece un reconocimiento. Lo que sí nos preocupa es que se utilice esa misma policía que es contra grupos violentos, para estas detenciones como hemos visto últimamente, que podría hacerlo tranquilamente, como siempre ha correspondido, a la Policía Judicial”.
“[Han acusado a la Diviac de policía política] No, lo que dijimos es que se podría estar derivando a eso. Se dijo claramente que esto es sin querer queriendo, no es que haya una mente o alguien que lo haya planificado. Ese término lo retiramos, ‘policía política’”.
Estas declaraciones fueron dadas a la prensa y demuestran que la policía solo les sirve de caballito de batalla cuando cumplen sus intereses, cuando hacen todo lo contrario, como detener corruptos, ahí no son tan defendibles por el fujimorismo.