El alcalde de Lima, Jorge Muñoz, anunció que, por abrumadora mayoría, este 31 de agosto se decidió en Concejo Municipal que la Plaza de Toros de Acho no podrá ofrecer ningún “espectáculo” de maltrato animal, lo que se constituye en “un paso importante para una ciudad más humana”.

La moción no es normativa y constituye un acto simbólico, en el que la comuna limeña expresa su voluntad política para rechazar todo acto que comprenda dañar a los animales, como son las corridas de toros que tradicionalmente se hacían en el coso de Acho, lugar que fuera ambientado para servir como refugio de personas sin hogar de Lima.