La organización feminista Demus, miembro de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos, envío una misiva al secretario ejecutivo de esta organización, Jorge Bracamonte, señalándole su malestar por no socializar previamente con los integrantes de esta red de organizaciones sociales, la “Proclama Ciudadana” suscrita por Pedro Castillo y Keiko Fujimori. Sostienen que tomaron conocimiento de la iniciativa cuando ya estaba publicada en medios de comunicación y redes sociales.

Frente a ello cuestionan, en primer lugar, el “rol mediador” que se le ha dado a las iglesias católicas y evangélicas porque este hecho no refuerza “la laicidad en los espacios políticos”. En segundo lugar, y más preocupante para Demus, según señalan, es el hecho de que la Coordinadora “pretenda asumir un rol mediador y legitimar a la candidata Keiko Fujimori, cuando todas las organizaciones que conformamos parte de esta red venimos luchando frontalmente contra la corrupción y la vulneración de derechos humanos que el fujimorismo a perpetrado en estas últimas décadas”.

Por último, solicitan una rectificación de esta Proclama, un pronunciamiento con todas las voces de quienes integran la CNDDHH y “un mensaje claro de deslinde con el fujimorismo y de defensa de los derechos humanos y de la Democracia”.

Carta de Demus sobre la Proclama Ciudadana

Señor
Tito Bracamonte
Secretario Ejecutivo de la CNDH
Presente. –

De nuestra especial consideración,

Por la presente expresamos nuestra preocupación y rechazo por la Proclama Ciudadana, suscrita por la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos, el pasado sábado 08 de mayo. Como integrante de la CNDH, consideramos que una decisión de esta magnitud, y en este contexto electoral, debió ser socializada previamente con todas las organizaciones que formamos parte de esta red, tal como se ha hecho con muchos otros comunicados y pronunciamientos. Hemos tomado conocimiento de la misma cuando ha sido publicada en medios de comunicación y redes sociales.

Como organización feminista, ponemos en cuestión el rol mediador con el que organizaciones religiosas se quieren colocar en este contexto electoral, pues debemos aspirar a reforzar la laicidad en los espacios políticos, sin embargo, es aún más preocupante que la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos pretenda asumir un rol mediador y legitimar a la candidata Keiko Fujimori, cuando todas las organizaciones que conformamos parte de esta red venimos luchando frontalmente contra la corrupción y la vulneración de derechos humanos que el fujimorismo a perpetrado en estas últimas décadas.

Como organización feminista, defensora de los derechos humanos de las mujeres y de las personas LGTBIQ, organización que defiende la igualdad y el enfoque de género, que acompaña los procesos de justicia y reparación de las víctimas de esterilizaciones forzadas y de violencia sexual en conflicto armado interno, no reconocemos a Keiko Fujimori y su partido político como interlocutores válidos. Sabemos que su accionar no es democrático y que los Poderes e instituciones del Estado, así como los derechos humanos de miles de peruanas y peruanos, estarán en serios riesgos de ser afectados.

Frente a todo ello, como integrantes de la red, solicitamos una rectificación de esta Proclama, solicitamos un pronunciamiento con todas las voces de quienes integramos la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos, y con un mensaje claro de deslinde con el fujimorismo y de defensa de los derechos humanos y de la Democracia.

Atentamente

Romy García – Jessenia Casani – Sayda Lucas
Integrantes de la Dirección Colegiada de Demus