Por Pier Paolo Marzo
Huánuco tiene 247 mil hombres en edad de ser padres. No sabemos si lo son, pero sí sabemos que al menos 12,700 de ellos están demandados por alimentos. Y además, que más de 2470 padres pasaron su día en el penal de Huánuco, muchos de ellos por el delito de omisión a la asistencia familiar.
Además de estos, no sabemos cuántos son los padres ausentes, por propia irresponsabilidad o por haber sido víctimas de la violencia política que azotó nuestra región en décadas anteriores.
Ni cuántos están dedicando parte de sus vidas a compartir con sus parejas, de igual a igual, el cuidado de sus hijos pequeños o adolescentes, es decir, ejerciendo una paternidad responsable. Ni cuántos están recibiendo el cariño de hijos e hijas agradecidos por haberlos acompañado en su formación como buenas personas en la vida ciudadana.
Esta data oscura, que se refleja en la poca información sobre nuestros padres nos da una idea de la poca importancia que la paternidad ha tenido para nuestras autoridades y estudiosos, más allá de los saludos de un viernes y un domingo.
Frente a esta ausencia estadística, veamos qué nos dicen los buenos ejemplos de padres:
Un padre responsable se hace cargo del cuidado de hijos e hijas igualitariamente, involucrándose desde la procreación – ¡cuán importante es para una mamá gestante sentir que su pareja está con ella en la gestación! – Que lo digan nuestras madres.
Comparte con mamá las tareas domésticas, no como ayuda, porque no lo es, asumiendo equitativamente la crianza de hijos e hijas, los cuidados de su salud, su estimulación y desarrollo educativo. Realiza actividades como leerles cuentos, cantarles canciones, contándoles historias, apoyándoles en sus tareas y jugando. Todo esto ya lo hacen muchos padres en Huánuco. Pero sus buenos ejemplos tienen que generalizarse.
Así que si tienes hijos varones, incluye en los juegos cariño hacia las actividades paternales. Cargar y jugar con bebes no es una actividad que solo se le deba implantar a las niñas.
Si eres padre, ¿haces o has hecho esto con tus hijos? Si eres hijo, ¿apoyarás a tu padre en que lo siga haciendo, o lo empiece a hacer?
Si eres alcalde, ¿promoverás las escuelas de paternidad responsable y masculinidad saludable para padres en tu municipio y otros programas de desarrollo que fortalezcan la sana paternidad? Si eres regidor o regidora, consejero o consejera ¿fiscalizarás y promoverás estos tipos de programas?
Si eres gobernador regional, ¿impulsarás la paternidad responsable en toda la región, desde los centros de salud mental comunitarios y las instituciones educativas? ¿Así como generar alianzas que promuevan más aún los talleres que ya tiene el Ministerio de la Mujer sobre estos temas?
¿Y en general, si eres autoridad, darás ejemplo de cuidado responsable de hijos si eres padre?
Todos tenemos la oportunidad, de promover desde nuestros espacios familiares, sociales y labores la paternidad responsable. ¡Hagámoslo!