El 1 de marzo se encontró el cuerpo de una niña de aproximadamente cinco años de edad dentro de un costal de polietileno en una vivienda semiabandonada del asentamiento humano Micaela Bastidas del distrito de San Juan de Lurigancho, en Lima. La niña tenía una chompa rosada tejida de lana y un gorro.
El dueño de la vivienda sostiene que han debido arrojarla después de octubre del año pasado, pues él estuvo realizando una jornada de limpieza en su casa, ya que vive en Huancayo.
Las investigaciones realizadas sobre el cadáver señalan la niña, que estaba cubierta con una chompa tejida de lana, habría sido asesinada hace cuatro años.
Los peritos de criminalística en coordinación con el equipo de antropólogos de la Policía Nacional del Perú han reconstruido el rostro de la niña para ayudar a su identificación.
Cualquier información que se tenga sobre su identificación pueden escribir al fanpage de Mujeres Desaparecidas Perú.