Balón de Oro del último Mundial Femenino de Fútbol, capitana del equipo de fútbol de Estados Unidos que derrotó a Holanda en la final por 2 a 0, pero sobre todo, icono LGTBI, que no duda en enfrentarse a la FIFA y al propio presidente de su país.

La goleadora señaló que no iba a ir a la Casa Blanca si ganaban, a lo que Donald Trump le respondió: “Debería ganar primero antes de hablar ¡Termina el trabajo!”. Y lo terminó con creces, Estados Unidos se llevó el cuarto Mundial Femenino de su historia.

Sobre la FIFA señaló que esta no respeta el fútbol femenino por la coincidencia en la fecha final del Mundial Femenino con la Copa América y la Copa de Oro.

“Es una idea terrible ponerlas todas juntas el mismo día. Esta es la final del Mundial. La final del Mundial se establece con tanta antelación que esto resulta increíble. Así que no, no creo que la FIFA nos tenga, en general, el mismo nivel de respeto que tiene hacia los hombres”.

También pidió más dinero en premios para el fútbol femenino, considerando que el masculino repartirá 440 millones de dólares en Qatar 2022. La FIFA respondió que la suma para el fútbol femenino subirá a 60 millones de dólares para el 2023.

“Deberían duplicar ahora (lo que destinan al fútbol femenino) y luego usar esa suma para duplicarla o cuadruplicarla para la próxima vez. A eso me refiero cuando pregunto si nos sentimos respetadas”.

Rapinoe salió del clóset públicamente en 2012 y con su pareja, Sue Bird, jugadora de basket, posaron para la portada de ESPN en 2018.

“Solamente piensen cuán lejos hemos llegado, pero además en el clima actual y en desafío ante el mismo. No es que solo somos atletas mujeres, sino que además estamos en una relación. Es increíble”

Rapinoe

La futbolista, junto con 27 deportistas más, mantienen un proceso judicial en contra la Federación de Fútbol de su país. Ellas están demandando a su federación por discriminación de género, lo que incluye una exigencia de pago igualitario y mejores condiciones de trabajo.

“No creo que nadie pueda negar que existen desigualdades de género en este mundo, que existe una brecha salarial, que hay discrepancias en el pago”.

“Así que para nosotras, no se trata solamente de dejar nuestro deporte en un lugar mejor y de mejorarlo para las chicas jóvenes que vendrán después”

“Pero, en general, se trata de inspirar a las mujeres alrededor del mundo para que defiendan aquello en lo que creen. Ellas tienen un aliado en nosotras. Estamos con ellas, las apoyamos y vamos a continuar este lucha por el tiempo que haga falta”.

En 2016 mostró su apoyo a las protestas contra el abuso policial hacia personas afrodescendientes en su país, arrodillándose al momento que sonaba su himno nacional.

Rapinoe protesta arrodillada antes de un juego de fútbol en 2016.

“Puedo entender si piensas que estoy irrespetando la bandera al arrodillarme, pero es precisamente por mi extremo respeto a la bandera y a la promesa que ella representa que he decidido manifestarme de esta manera”.

“Cuando me pongo de rodillas, estoy frente a la bandera con todo mi cuerpo, mirando directamente al corazón del mayor símbolo de libertad del país, debido a que creo que es mi responsabilidad -tanto como la de ustedes-: asegurarme de que todos puedan disfrutar de la libertad en este país”.

Por esta y muchas razones más, amamos a Megan Rapinoe.