Lima, 2 de octubre de 2024. Se le vino la noche al conductor y cómico Andrés Hurtado “Chibolín”, quien luego de largos años enriqueciéndose ilícitamente, gracias a sus contactos con el poder, con los cuales traficaba influencias, prebendas y privilegios, ha sido defenestrado de su estatus ganado a pulso a través de favores non santos a personajes decisivos en el Poder Judicial, Migraciones y otros, y dormirá en la cárcel desde hoy.

Así lo decidió el juez Juan Carlos Checkley Soria, a pesar de que en la comparecencia, Hurtado pidió llevar el proceso en libertad por ser padre de una menor de edad. Ante la posible fuga del detenido, el juez no accedió a su pedido y determinó 18 meses de prisión preventiva por los presuntos delitos de cohecho pasivo, corrupción y tráfico de influencias.

No tuvieron la misma “suerte” la magistrada Elizabeth Peralta ni el minero ilegal Javier Miu Lei, quienes solo tienen comparecencia con restricciones y el pago de 35 mil soles la primera y un millón de soles el segundo.

El juez no asumió como posible intento de fuga el encontrar una maleta lista y unos pasajes a Miami en la casa de Peralta el día de su allanamiento, tampoco como obstrucción a la justicia que haya borrado todos sus mensajes de WhatsApp, todo su historial de búsquedad, y todas sus rutas de Google Maps.