Luego de que se anunciara que la lobista Karelim López se había convertido en colaboradora eficaz de la Fiscalía para evitar la cárcel, y declarara una serie de situaciones de corrupción en donde están involucrados presuntamente el presidente Castillo, ministros y congresistas, al presidente no se le ocurrió mejor idea que volver a culpar a la prensa de lo que está pasando a la interna de su gobierno.

López ha señalado que existe una mafia liderada presuntamente por Castillo, en complicidad con el ministro de Transporte y Comunicaciones, Juan Silva, y cinco congresistas de Acción Popular, conocidos como “Los Niños”, quienes estarían direccionando las licitaciones a empresas de su conveniencia.

Por ello, el presidente se pronunció a través de su cuenta de Twitter señalando a la prensa como la principal responsable de estas “especulaciones”, y que busca “atentar como la democracia”; sin embargo, las declaraciones de López han aparecido en todos los medios, incluidos portales independientes que vienen investigando las contrataciones que ha hecho el Estado.

Castillo sigue mencionando a su gobierno como el “gobierno del pueblo”, a pesar de que su desaprobación crece cada día; asimismo, señaló que las declaraciones de López no tienen sustento jurídico, pero una de las condiciones para ser colaborador eficaz es presentar pruebas de lo que se afirma antes de ser aceptado en esa figura.

Castillo también mencionó que estas son “maniobras políticas antidemocráticas con la finalidad de generar inestabilidad en el país”, aunque con las últimas decisiones que ha tomado, como colocar en el ministerio que mejor trabajaba, Salud, a un personaje que lo está desmantelando no fue lo mejor para mantener alguna estabilidad en su gobierno.

Por último, hizo “un llamado a la comunidad internacional y al pueblo peruano para activar la Carta Democrática Interamericana y permanecer atentos contra cualquier intento desestabilizador y de golpe en el país, perpetrado por quienes aún no aceptan su derrota y atentan contra la ciudadanía”.