El congresista Pedro Olaechea, exoficialista, dijo que su salida de la bancada de Peruanos Por el Kambio (PPK) se debe a que esta ha perdido el norte.

“Si como bancada empiezas a perder el norte de la estructura por la cual viniste, es porque estás llegando otra vez a caer en el marasmo político y en la marea política. Entonces, uno no puede olvidarse qué cosa fue lo central”, dijo Olaechea a un medio local.

No sabemos si el barco se está hundiendo, pero sí que los cuyes están saliendo. La poca comunicación que existió entre el congresista Olaechea y el presidente Martín Vizcarra parece sumarse al cúmulo de razones por la que el parlamentario se separó de la bancada.

Ayer, Olaechea manifestó a través de un oficio que: “Me he dado con la sorpresa de que mis principios y mis convicciones, y mi negativa de ponerme al costado a la hora de tomar decisiones importantes, se han vuelto incómodas para muchos del oficialismo”.

Para Olaechea los desacuerdos entre él y los oficialistas (sin algo de manera personal, como manifestó) forman parte de la vida política. “Reconozco que puedo ser muy crítico, pero las objeciones que hice tanto a la bancada, como a sus integrantes, siempre fueron de manera privada y con gran respeto. Esa cortesía no ha sido recíproca”, señaló.

Las diferencias

Recordemos que, durante la votación para la moción de censura contra el presidente del Congreso, Luis Galarreta, el parlamentario Olaechea votó en contra y no respaldó a su bancada que optó por la abstención.

Asimismo, en la sesión que definía la suspensión de Kenji Fujimori, Guillermo Bocángel y Bienvenido Ramírez, el exoficialista votó a favor de la sanción. El vocero del grupo oficialista, Gilbert Violeta, señaló en su momento que Olaechea no respetó el acuerdo de la bancada.

Con este alejamiento, el grupo oficialista se redujo a catorce. Los congresistas Alberto de Belaunde, Vicente Zeballos y Gino Costa fueron los primeros en apartarse, luego del indulto a Fujimori otorgado por Pedro Pablo Kuczynski. Además, la bancada separó al congresista Roberto Vieira por faltar a los principios éticos del partido.