Luego del cambio de gabinete, un ministerio clave como el de Educación, pasa de manos de Daniel Alfaro, quien demoró en tomar una posición firme acerca del enfoque de género, a Flor Pablo, una profesional que no ha dudado ni un momento en resaltar que esta herramienta puede cambiar no solo la educación de los niños y niñas, sino a la sociedad entera.

Sanmarquina, licenciada en Lengua y Literatura y con más de 20 años de experiencia en puestos de dirección dentro del sistema educativo nacional, entre sus primeros mensajes con el cargo puesto estuvo que “el enfoque de igualdad de género es parte de un planteamiento integral que propone el Currículo Nacional. Si queremos una sociedad sin violencia debemos reconocer que hay una brecha entre hombres y mujeres”.

El 8 de marzo se realizó la audiencia en donde se dieron los últimos alegatos para que el Poder Judicial decida de una vez por todas, luego de dos años, si el enfoque de igualdad de género va o no va en el currículo nacional debido a una demanda de acción popular de un grupo conservador que intenta bloquear esta perspectiva de la educación peruana.

Ahora, la Sala tiene menos de un mes para tomar una decisión trascendental sobre la educación de los niños y niñas del Perú, esperamos que esté en sintonía con lo que viene sosteniendo el gobierno, las organizaciones feministas y diversas especialistas en el tema, que el enfoque de género sirve para disminuir la violencia que viven las mujeres, que funciona para que muchos hombres, educados en una masculinidad tóxica renuncien a esta, y que a largo plazo nos podrá dar una sociedad que conviva de forma armónica y que cierre las enormes brechas de desigualdad que se viven actualmente.