Mujeres diversas realizaron una foto en tetas en protesta por la violencia sufrida el 24 de noviembre en la Marcha contra la Violencia hacia las Mujeres #25N, marcha que se realiza todos los años para sensibilizar sobre las formas de violencia continua que viven las mujeres en el Perú.
A pesar de ser una marcha contra la violencia en donde participan miles de mujeres, la policía intentó detener a una de ellas porque estaba marchando en tetas, esto originó que decenas de mujeres se enfrentaran a la represión policial con el fin de liberarla de los policías que la estaban agarrando para llevarla a la comisaría.
La foto de las activistas feministas está acompañado de un potente pronunciamiento en contra del control del cuerpo de las mujeres de parte del Estado. Asimismo, exigen que no haya policías en las marchas de las mujeres, y que en lugar de estar intentando reprimirlas, se pongan a perseguir a agresores.
“El sábado 24 de noviembre, en la Marcha contra la Violencia hacia las Mujeres, una de nuestras hermanas fue violentada por la policía, ¿su “delito”? Mostrar las tetas libremente, usar su cuerpa como arma de lucha, decirle a la sociedad que el patriarcado tiene que morir, y que nosotras lo mataremos”.
Les dejamos el pronunciamiento completo:
QUE QUEDE BIEN CLARO:
¡NUESTRAS CUERPAS UNIDAS SON LA RESISTENCIA!
¡SI TOCAN A UNA, RESPONDEMOS TODAS!
Por mucho tiempo se buscó cultivar en nuestras cuerpas y en todos lxs cuerpxs disidentes la sumisión y la violencia, para que no puedan florecer en ellas el poder de nuestras madres, de nuestras abuelas, de nuestras hermanas, de nuestras heroínas; para que se inscriban en ellas las miradas de otros, los deseos de otros, los poderes de otros. Pero, así como han intentado ordenar, disciplinar y controlar nuestras cuerpas, así también hemos aprendido a revelarnos a este destino, hemos roto con el mandato patriarcal y nos hemos liberado individual y colectivamente.
Acá estamos las otras, las racializadas, las sudacas, las cuerpas cholas, las mestizas, las indígenas, las afro, las migrantes, las analfabetas, las explotadas, las lesbianas, las trans, las bisexuales, las fluidas, las mayores, las jóvenes, las niñas, las flacas, las gordas, las que decidimos no tener hijxs, las que trabajamos dentro y fuera de la casa, las que nos reconocemos, las que nos escuchamos, las que nos abrazamos para protegernos de los agresores y de la policía. Las silenciadas, las empoderadas, las buenas, las malas, las peores, las locas, las machonas, las putas, las frígidas. Las madres, las hermanas, las hijas, las nietas, las amantes y las compañeras de las brujas que no pudiste quemar, de las que no pudiste esterilizar, de nuestras desaparecidas. Somos las que abortan, las que te ponen el cuchillo en el cuello cuando intentas matar a una de nosotras, las que lucharán por justicia frente a los penes violadores.
No nos da la gana de pasar la página: ya demasiadas páginas de periódicos han pasado, describiendo cómo nuestras hermanas murieron, cómo las violaron, cómo las golpearon, cómo las torturaron, cómo las obligaron a ser madres. No queremos pasar la página, queremos que esas páginas no se vuelvan a escribir nunca más.
Este es un grito colectivo lleno de rabia y lleno de furia, pero también lleno de esperanza, porque trabajamos colectivamente para que ninguna mujer más tenga que vivir lo que nosotras vivimos, para que nuestrxs cuerpxs y nuestras tetas sean liberadas de la opresión patriarcal, y seamos reconocidas como sujetos políticos, que pueden estar libres y seguras en el espacio público, ese que tanto nos han negado, ese que sigue siendo controlado por los representantes de un Estado fascista y represor.
Nuestrxs cuerpxs son usados como campos de batalla, pero en esta guerra nosotras los seguimos transformando en campos de resistencia. No permitiremos que nos prohiban disponer de nuestrxs cuerpxs cuándo y cómo queramos. Cuando nuestras tetas sirven a la sociedad patriarcal, en publicidad, chistes, pornografía, como negocio, para compra y venta, para el placer masculino, para generar morbo, nadie las censura, pero si estas son usadas como herramientas de lucha o de vida, rápidamente buscan esconderlas, detenerlas, censurarlas, reprimirlas, encarcelarlas, desaparecerlas, más aún si son cuerpas racializadas, cuerpxs históricamente vulneradas por la sociedad racista en la que vivimos.
El sábado 24 de noviembre, en la Marcha contra la Violencia hacia las Mujeres, una de nuestras hermanas fue violentada por la policía, ¿su “delito”? Mostrar las tetas libremente, usar su cuerpa como arma de lucha, decirle a la sociedad que el patriarcado tiene que morir, y que nosotras lo mataremos.
Este TETAZO es nuestra respuesta a esa violencia: nuestras tetas son armas de resistencia, las sacaremos a las calles, las seguiremos usando para luchar, no nos detendrán más. Nunca más ganarán aquellos que prefieren vernos ocultas o muertas. Ganarán nuestras cuerpas y lxs cuerpxs disidentes, ganarán nuestras tetas libres, ganarán nuestras vidas.
¿Nos quieren invisibles?
Seremos más cada día.
¿Nos quieren silenciosas?
Gritaremos más fuerte
¿Nos quieren con miedo?
Lo que tenemos es furia.
¿Nos quieren solo como cuerpxs sexualizadxs para su placer?
Seremos más autónomas y libres.
¿Nos quieren escondidas para dar de lactar?
Mostraremos más tetas.
¿Nos quieren sumisas?
Mostraremos más tetas.
¿Nos quieren presas?
Mostraremos más tetas.
¿Les molestan nuestrxs cuerpxs desnudxs en la lucha y la resistencia?
Mostraremos más tetas.
Desde este espacio de mujeres diversas reafirmamos que no queremos más policías en nuestras marchas, que nos podemos cuidar bien y solas entre nosotras. Exigimos que mientras nosotras marchamos, ustedes estén capturando agresores. No queremos exponernos más a lo que la policía en este país encarna: desidia, negligencia, omisión, indiferencia, machismo, misoginia, homolesbobitransfobia.
Vamos a tomar todas las calles, vamos a parar a todos los autos, vamos a llamar a todos los que se quedan mirándonos a que nos acompañen. No necesitamos sus armas, que muchas veces han servido para matar a las mujeres; no necesitamos sus escudos, que muchas veces han servido para empujar y expulsar de las calles a las que luchan, para apañar y blindar a los corruptos y al sistema; no necesitamos sus bombas lacrimógenas ni sus uniformes; no necesitamos su moral hipócrita, sus órdenes, sus jerarquías y su rol de cuidadores de un Estado autoritario, cómplice de nuestras muertes. No los necesitamos, nos tenemos a nosotras.
¡Mi cuerpa, mis tetas, mi voluntad, mi decisión!
¡El patriarcado se va a caer, lo haremos caer!
#Tetazo #TetazoPeru #TocanAUnaRespondemosTodas #ElPatriarcadoVaACaer #MiCuerpoMisTetasMiDecision #VivasNosQueremos