8 am

Domingo 28 de marzo del 2021. Una mañana cotidiana, la gata comienza a despertarme a las 6:30 am, como suele hacerlo cada día. No le hago caso, intento dormir un poco más. Luego del desayuno, me pongo a ver las novedades por las redes sociales. Y veo por medio de un post de una compañera los resultados de la encuesta del IEP mostrados por el diario La República. Como le mencioné, no puedo creer que en segundo lugar esté Rafael López Aliaga de Renovación Popular. ¿Cómo es eso posible? Pensé que el mostrar un discurso retrógrado, fundamentalista y antiderechos eran agregados suficientes para convencer que no es ni por broma una de las mejores opciones para el país, más aún teniendo en cuenta la verdad detrás del mito de su fortuna. ¿Qué ocurre con el país? ¿Qué nos sucede como sociedad y como ciudadanos con responsabilidad de elegir su futuro político?

8.05 am

Llega por medio del WhatsApp del edificio donde vivo y que es usado para coordinar asuntos internos, un saludo por el inicio de la semana santa, la cual me tiene sin cuidado pues no es de mi interés. Sin embargo, bien a mi estilo de crear polémica me decidí a ensayar un tema en el grupo de mi edificio, el cual para mí es como una pequeña muestra de laboratorio del país .

Y luego siguió una fila, no de insultos, pero sí de saludos por el domingo de ramos y el señor, y toda la parafernalia que conocemos por los demás vecinos (como dejando en claro que estoy en un edificio mayoritariamente católico); no todos felizmente, lo que me dio una cierta tranquilidad.

10.51 am

Muchos saben que por años pertenecí al MHOL, donde además de hacer activismo trabajaba en diferentes proyectos de intervención. Fue una época en que se hicieron muchas cosas interesantes, centrado principalmente en la formación de un Frente de Representación LGBT Nacional y sobre todo promover nuevos cuadros y fortalecer los diferentes activismos en las regiones.

También saben que renuncié en medio de un contexto delicado. Y hoy me di cuenta que ni en los periodos de mayores tensiones se me había llegado a vetar de hacer comentarios. No puedo hacer comentarios a ninguna publicación que se hace en el fanpage. ¿Por qué? ¿Cuál es el motivo? ¿Acaso por un comentario crítico que hice sobre su postura neutral acerca de los candidatos para estas elecciones?

Sin duda alguna, puede parecer que estos son hechos totalmente aislados, pero pensando en el 9.5%-9.7% que obtiene López Aliaga en esta última encuesta, pues como que empieza a haber cierto sentido. ¿Qué contenido tiene la imagen/discurso de este candidato que lo hace calar en parte en el imaginario social de nuestra sociedad? ¿Qué mecanismos mueve este señor en nuestra intersubjetividad?

Y debo decirlo, me estoy refiriendo al imaginario social, es decir, lo que gente tiene en su mente frente a un hecho, sujeto, etc., y que dicho imaginario es, además, en sociedad, intersubjetivo, en otras palabras, compartido. Y lo aclaro ya que hace unos días, frente a una nota que hice sobre la imagen de Prochazca en un estudio sobre ‘fuga de talentos’ (por lo mostrado en el diario Gestión, al parecer lo han asumido como rostro símbolo del estudio), muchos se escandalizaron, porque al parecer el médico ahora es intocable. Pero veamos, no había ninguna crítica hacia él, sino a lo que él puede llegar a representar, significar e incluso posicionar, ¿o acaso creen que su aparición en ese medio y en el estudio es gratuito? Por ese motivo, siempre hay que prestar atención sobre lo que alimenta un imaginario social, en donde los medios, el mercado, cumplen un rol clave, ya que la introducción de ciertas imágenes va validando, por ejemplo, quiénes pueden ser voceros para hablar de una problemática, y quiénes quedan fuera invisibilizados.

Habiendo aclarado ello y regresando a los hechos, pues en el evento de las 8:05 am el hecho está muy claro. Creo que tenemos aún un Estado que no ha hecho un quiebre con la iglesia, y que no existe una ciudadanía laica, sino más bien sujetos que responden a una lógica confesional, tutelar, y que calza perfectamente con todo discurso que prometa recuperar los valores cristianos con fortaleza y mano dura. Pareciera que en el imaginario de la sociedad existiera la necesidad de la figura de un padre rígido, que cubra una permanente sensación de orfandad que nos tiene a la deriva al parecer desde hace buen rato. Alguien que establezca orden, que llene un vacío espiritual, además.

En el evento de las 10.51 am sí sería descabellado pensar que mis excolegas del MHOL están alineados con López Aliaga, un candidato que no ha mostrado interés por los derechos LGBTI, y que más bien creo que se abocaría a asentar la omisión del Estado en la protección de nuestros derechos; sin embargo, sí me preocupa un rasgo que compartirían con ese señor, la intolerancia, la incapacidad de recibir críticas y no poder establecer una discusión. Es decir, ¿se molestan con todo quien no apoya y critica la candidatura de Paredes? ¿Quién está detrás de esta censura de la cual no soy el único afectado? O no les gusta que se critique su falta de decisión y postura en estas elecciones frente a los candidatos congresales. Un absurdo sí, pero preocupante, pues estaríamos frente a una situación bizarra, ya que sin haber ganado las elecciones el candidato de Renovación Popular, ya tenemos ciertas manifestaciones que nos llevan a él. Esto último me lleva a la pregunta, ¿todos tenemos algo de López Aliaga?

Hagamos confesión entonces.