El abogado Luis Mejía Lecca, extesorero y personero legal de Fuerza Popular, reveló que quemaron toda la documentación que pudiera resultar incriminatoria para el partido Fuerza Popular, con el fin de que ninguna prueba cayera en manos del fiscal José Domingo Pérez.

Así, la mayoría de documentos que se encontraban en el local de la calle Los Morochucos, Urbanización Santa Constanza, Surco, donde se centralizó la campaña de Keiko Fujimori. Otros, según Mejía, fueron trasladados por Adriana Tarazona Martínez, Giannina Delgado Rospigliosi y Rocío Pardo-Figueroa Álvarez, a sus propios domicilios el 7 de diciembre de 2017, día que se realizó el allanamiento.

El expersonero, quien actualmente se encuentra preso por organizar la compra de falsos aportantes a la campaña presidencia de la líder de Fuerza Popular, señaló que la orden fue dada por la asesora personal de Keiko Fujimori, Ana Herz de Vega, quien coordinó la incineración en su propia casa. Esta información ha sido corroborada por otro testigo.

La destrucción de los documentos se realizó el 9 de marzo de 2018, con dos miembros más del partido fujimorista: Shirley Montenegro Flores y Melissa Sánchez Bernaola. Ambas fueron citadas por la Fiscalía de Lavado de Activos, Melissa Sánchez, quien trabaja en el despacho del congresista Carlos Tubino, se presentó y testificó, Shirley Montenegro, quien trabaja con la congresista Gladys Andrade Salguero, no se ha presentado a ninguna de las tres citaciones, por lo que será llevada de grado o fuerza.

Hoy, los domicilios de ambas mujeres fueron allanados en busca de pruebas de los delitos de los que se les acusa a la cúpula de Fuerza Popular.