Keiko Fujimori fue detenida por el delito de lavado de activos y ha sido sindicada como líder de una presunta organización criminal. La orden de prisión preliminar por 10 días fue solicitada por el fiscal José Domingo Pérez y aceptada por el juez Richard Concepcion Carhuancho.

La lideresa fujimorista llegó pasadas las 9:30 am de hoy a la Fiscalía, junto a su esposo Mark Vito, para responder por los presuntos aportes irregulares que habría recibido su campaña presidencial en 2011, y efectivos de la Policía la detuvieron en las mismas instalaciones.

La ex candidata presidencial fue convocada nuevamente por el fiscal José Domingo Pérez, ya que en agosto pasado no acudió a su interrogatorio aduciendo que debía realizar actividades proselitistas al interior del país.

La abogada de Fujimori, Giuliana Loza, calificó de abusiva y arbitraria esta detención y que no amerita la medida. Según ella, el “único argumento” que sostiene la prisión preliminar es “por ser presidenta del partido Fuerza Popular durante la campaña del 2011”.

El juez Concepción Carhuancho también ordenó la detención de otras 19 personas, entre ellos Jaime Yoshiyama y Augusto Bedoya, intermediarios de los aportes de Odebrecht a la campaña de Keiko Fujimori.

Peligro de fuga

En la documentación trascendió el argumento del juzgado:

“El presente caso, se evidencia grave peligro de fuga de parte de Keiko Sofía Fujimori Higuchi porque ha constituido una organización criminal en el interior del partido político Fuerza 2011 (HOY Fuerza Popular) que tenía entre sus fines obtener el poder políticos y, por consecuencia, tiene un nivel de influencia e interferencia en el Poder Legislativo y Poder Judicial”.

Asimismo, el juzgado acusó a esta organización de recibir aportes ilícitos provenientes del grupo empresarial brasileño Odebrecht, con el fin de obtener réditos en diferentes planos de interés como el otorgamiento de obras sobrevaluadas, beneficios normativos y  favorecimiento judicial.

 

Odebrecht y lavado de activos

Recordemos que Jorge Barata declaró que la constructora Odebrecht entregó un millón de dólares en aportes para la campaña del 2011. El dinero, según Barata, lo recibieron los ex dirigentes fujimoristas Jaime Yoshiyama y Augusto Bedoya, aunque ellos han negado esa versión.

La Fiscalía ha recogido esta manifestación, ya que los falsos aportantes que utilizaron para pasar el dinero de manera legal, no tienen  como sustentar las donaciones que ascienden a mas de 20 mil soles. Lo mismo sucedió con los informes rendidos por Chlimper sobre los cócteles y las millonarias sumas obtenidas supuestamente en estos eventos.