A pesar de que el presidente del Poder Judicial, José Luis Lecaros, negara en agosto del año pasado y garantizara incluso que hubiera mantenido comunicación alguna comunicación con el corrupto exjuez supremo César Hinostroza, estos días tuvo que reconocer que sí se comunicó con él.
Las llamadas se produjeron entre enero de 2016 y diciembre de 2017, y según Lecaros fueron de parte de Hinostroza para saber si estaba en su oficina y sobre temas de trabajo.
El presidente del Poder Judicial e integrante del Comité Especial que eligió a la Junta Nacional de Justicia también se comunicó con los exmiembros del fenecido Consejo Nacional de la Magistratura. Con Iván Noguera registró siete llamadas, con Julio Gutiérrez Pebe fueron diez y con Guido Aguila Grados, una.
Todas estas llamadas están siendo investigadas por la Fiscalía pues se sospechan que fueron hechas para asegurar ser representante del Poder Judicial ante el Jurado Nacional de Elecciones.
Lecaros señaló que las llamadas de los exmagistrados eran para pedirles favores, es decir, tráfico de influencias, figura delincuencial que nunca denunció.
Noguera
Este lo llamó para pedirle un puesto para “una señorita”, lo llamó dos o tres veces para insistirle, pero “no habían plazas” y además ” con Iván Noguera yo no tenía ninguna cercanía”.
Gutiérrez
A este personaje lo recibió en su oficina cuando era presidente de la Primera Sala Penal Transitoria de la Corte Suprema. Le pidió que lo “ayudara” con la casación que había interpuesto el exgobernador de Áncash, Enrique Vargas Barrenechea, condenado por mentir en su hija de vida. “Al final resolvimos en contra, se declaró infundada la casación, él buscaba interceder por el exgobernador”.