En el Pleno Extraordinario que se realizó el día de hoy, sábado 8 de diciembre, solo para ver la suspensión por 120 días del congresista Moisés Mamani, la congresista fujimorista, Paloma Noceda, denunció haber sido acosada por un colega, quien le hizo un masaje “asqueroso” sin su consentimiento, hecho que hasta el día de hoy recuerda porque ya es un trauma para ella.

Señaló además que no solo lo hizo una vez, sino que intentó hacerlo otra vez. “Quiero contar una experiencia personal, el primer día que vine al Congreso, en la primera sesión, luego del ponche de Los Libertadores, me detuve a saludar a dos congresistas, uno de ellos me dice: ‘Qué bueno que haya gente como usted acá para que me alegre el panorama’. Yo en ese momento no sabía cómo reaccionar porque para ese congresistas él estaba dando un gran cumplido, parecía que era su mejor cumplido, pero en realidad eso era una ofensa, porque acá uno no viene alegrarle la vista o el panorama a nadie, acá uno viene a trabajar de igual a igual. Si una mujer se arregla es por respeto a la institución y a uno mismo, pero eso ocurrió”, contó Noceda

Segundo acoso sexual

“Otro segundo caso. Un día estoy en una reunión con colegas y yo estaba sentada, dando la espalda, y viene ese colega, seguramente estaba con el cabello sujetado, y me hace una suerte de masaje asqueroso en el cuello. No está acá el colega, hace un rato estaba. Ese masaje asqueroso hasta el día de hoy lo tengo en la mente cada vez que lo recuerdo, porque me generó repulsa, me generó asco, vómito. Y eso es cosa del día a día, señor presidente, porque acá las asesoras la pasan mal, las asistentes la pasan mal, porque siempre aprovechan cuando una mujer les da la espalda, cuando das la espalda, ahí hacen el barrido con la mirada de abajo para arriba. Esa persona que hizo este acto, yo hice un giro, le di un codazo, y el tipo cual ladrón al descubierto, me empezó a hablar, a atolondrar, hablando cualquier cosa, incoherencias, no fue una sola vez, lo intentó hacer una segunda vez en otra reunión. Luego de ello, yo hablé con el vocero que me representaba en ese momento, y le pedí que hablara con ese tipo, porque para mí es un tipejo, eso no merece llamarse congresista. Gracias a dios desde esa vez no he vuelto a tener mayor contacto con esa persona, con las justas lo habré saludado veces contadas con la mano.  Entonces, presidente, si nosotras pasamos este tipo de situaciones, cómo no vamos a creer el testimonio de la señora Lana Campos, por supuesto que le creo, todos lo hemos visto en la televisión, todos hemos podido oír su testimonio, la señora está diciendo la verdad, yo espero que el día de hoy demos una sanción ejemplar, porque francamente a veces no se sabe qué tipos de personas han venido al Parlamento. Personas que no respetan los principios básicos de convivencia, que van contra toda la ética, la moral. personas que son capaces de creer que tienen derecho de agredir a una mujer, de tocar a una mujer, con qué derecho. Presidente, yo estoy de acuerdo con esta sanción y que además se haga el trámite del desafuero al congresista Mamani”.

Solidaridad de parte de sus compañerxs 

Luego de las fuertes declaraciones de la congresista, muchos de sus compañeros le mostraron su respaldo.