La Corte Constitucional aprobó el matrimonio igualitario en Ecuador, un país que ya tenía unión de hecho a pesar de haber tenido un presidente sumamente conservador como Rafael Correa. Fueron cinco votos a favor de los nueve magistrados que conforman la Corte los que le dieron la oportunidad al país vecino de cambiar su realidad.

El fallo de la Corte modifica la Constitución de su país, y se suma a los países que ya aprobaron el matrimonio igualitario en la región: Argentina, Colombia y Brasil (recordemos que Chile solo tiene unión civil).

¿Y el Perú? Sin mencionar los intentos anteriores, en nuestro país tuvimos un tiempo álgido de activismo por la Unión Civil, propuesta presentada por el congresista Carlos Bruce y apoyada por organizaciones LGTBI, desde el 2013 al 2015, que se archivó el proyecto, y se aprobó la Sociedad Solidaria, proyecto de Martha Chávez para que las parejas de lesbianas y gays no pudieran ser legalizadas.

En diciembre de 2016, Alberto de Belaunde y nuevamente Carlos Bruce presentan la propuesta de unión civil, esta vez con legalización en el notario. En febrero de 2017 Indira Huilca y Marisa Glave presentan la propuesta de matrimonio igualitario con el respaldo de las organizaciones LGTBI.

Hasta el momento, ninguna de las propuestas ha sido debatida en comisiones, a pesar de que la Corte Internacional de Derechos Humanos ha resuelto que el Perú y todos los países miembros deben acatar “que todos los derechos patrimoniales que se derivan del vínculo familiar de parejas del mismo sexo deben ser protegidos, sin discriminación alguna con respecto a las parejas entre personas heterosexuales”, pero que “esta obligación internacional de los Estados trasciende a la protección de las cuestiones únicamente patrimoniales y se proyecta a todos los derechos humanos, reconocidos a parejas heterosexuales, tanto internacionalmente como en el derecho interno de cada Estado”.

Esto por una mayoría fujimorista que se niega a reconocer los derechos de las personas LGTBI. Aliados de los conservadurismos más rancios, tienen su caudal de votos en los defensores de la homofobia y el machismo, quienes votaron por ellos.

Está pendiente la decisión del Tribunal Constitucional sobre el fondo de la demanda de Oscar Ugarteche por el reconocimiento de su matrimonio en México. Esto ya debió estar resuelto hace varios meses para la crisis política, y tal vez el temor de algunos magistrados, ha estado demorando la respuesta de la alta instancia constitucional.

Se encuentra pendiente también la decisión del Reniec de reconocer en el DNI de un niño peruano que tiene dos madres. Al parecer, seremos de los últimos países en reconocer los derechos de la población LGTBI.