Susana Távara, secretaria general del Tribunal Constitucional (el más alto cargo administrativo del TC), señaló que el magistrado Eloy Espinosa-Saldaña la había agredido verbal y psicológicamente, el 3 de diciembre, al señalar sobre su trabajo, que era deficiente, y que ella era una mentirosa.

“Me dijo que tenía el peor concepto de mí, de que yo no estaba a la altura del trabajo que desempeñaba, que era una mentirosa. Yo también le contesté algunas cosas. Le dije que debería tener el valor de decirme las cosas en la cara y no siempre en presencia de otra persona”, manifestó la secretaria.

Esta última frase es importante, “decirle las cosas en la cara y no en presencia de otra persona”, porque denota que el magistrado Espinosa-Saldaña evitaba tener contacto con Távara a solas, tal vez sospechando lo que se venía. Y así fue, la discusión áspera que tuvieron no fue en presencia de nadie más que de los dos, aprovechando que la asistente del magistrado no había ido a trabajar ese día.

Los hechos

Távara se dirige al despacho de Espinosa-Saldaña, este no quiere atenderla porque su asistente no está, pero ella insiste y le pide que firme el acta, él se niega porque considera que no se ajusta a la verdad, por lo que le dice mentirosa, ella le dice: “Qué, ¿tú te crees perfecto?”, y él le responde: “No lo soy, pero tú eres menos (perfecta) que yo”.

Así hasta que ella se fue al baño, tomó agua de azahar, regresó al pleno, tomó una infusión y se desmayó, según cuenta Távara, Espinosa-Saldaña se acercó a atenderla, la llevaron a la clínica San Pablo, le dieron un día de descanso médico, y se tomó una tomografía.

Me dieron un día de descanso médico, pero decidí no tomarlo porque me fui a la Defensoría del Pueblo. Busqué una abogada que me asesore. Me informé sobre el tema de la violencia. Fui al hospital Hermilio Valdizán, donde un psiquiatra me dio un certificado de salud mental que también lo tengo“. Qué bueno que la atendieran rápidamente.

Távara ha estado en varios medios de comunicación señalando que el magistrado le dijo lo siguiente (porque lo tiene transcrito):

  • Que el acta no se ajustaba a la verdad
  • Que ella formaba parte de un plan orquestado para que la señora Ledesma sea presidenta del TC
  • Que tenía el peor concepto de ella y que no está a la altura de su padre
  • “Eres una mentirosa” (ocho veces)
  • “Yo no soy perfecto, pero tú eres bastante menos que yo”

Al ser consultado sobre los hechos, Espinoza-Saldaña respondió: “Yo he tenido una conversación áspera con una funcionaria, no he insultado, no he vejado, pero si alguien se siente ofendido, pido las disculpas del caso”.

El uso político del fujimorismo sobre esta denuncia

Luego de la “denuncia”, personajes a los que nunca les interesó la violencia contra las mujeres, pues asumen que se trata de un caso de esta naturaleza, empezaron una campaña para que se pronuncien las organizaciones feministas y el Ministerio de la Mujer.

Acá podemos ver cómo se orquesta la segunda parte de la campaña contra Espinosa-Saldaña:

¿Sospechoso?