El gobernador regional de Puno, Agustín Luque Chayña, fue detenido el sábado 30 de octubre por la Dirección contra la Corrupción de la Policía Nacional del Perú, acusado de liderar, presuntamente, una organización criminal con vínculo familiar.

La detención preliminar es por siete días mientras se investiga su relación con licitaciones ilegales en donde estaría implicada también su esposa Olinda Pacheco.

Los fiscales Willian Otazu Pinto y Carlos Jauregui Huallapa son los encargados del caso.

Las detenciones se dan en el marco de un megaoperativo realizado por la Contraloría de la República al Gobierno Regional de Puno, en donde más de 200 auditores se han desplegado para auditar las acciones tomadas desde el noviembre 2021 a febrero del 2022.

Hasta el momento se han detectado irregularidades y una presunta responsabilidad civil y/o penal y/o administrativa de 40 funcionarios, exfuncionarios, servidores y exservidores del Gobierno Regional de Puno por hechos que se han concretado entre 2013 y 2020.