El expresidente, Alejandro Toledo, sorprendió hoy a los medios peruanos con una llamada telefónica desde los Estados Unidos, país en el que se encuentra refugiado tras ser imputado con una orden de detención al ser vinculado en los casos Ecoteva y Odebrecht.
En diálogo con RPP, Toledo negó las acusaciones en su contra, entre ellas colusión, lavado de activos y tráfico de influencias. Además, calificó de “maldita justicia peruana” a jueces y fiscales que habrían aprobado su orden de prisión preventiva, razón por la cual no pudo estar con su familia.
“Yo quería estar cerca a mi familia y no me lo han permitido. Me han puesto esta prisión preventiva sin consultarme, han dicho que he recibido 20 o 25 millones del señor Barata o Maiman. Quiero que sepan y le digo a todos los peruanos, a los que admiro: Nunca he recibido ningún dinero del señor Barata ni del señor Maiman”.
Además, exigió que Jorge Barata demuestre el aporte de 20 millones de dólares que presuntamente recibió para obtener la licitación de la Carretera Interoceánica Sur – Trecho 02 y Trecho 03 a mediados de 2004 y que involucran a su exjefe de seguridad presidencial, Avi Dan On y al empresario peruano – israelí Josef Maiman, a quienes calificó rotundamente de “aspirantes a testigos no corroborados”.
“¿Por qué no entrega la fiscalía los documentos a mi defensa? La prueba más contundente es que te demuestren que eres ladrón. Que diga Barata a quién le ha dado, a dónde y cuándo. ¿Dónde está lo que me ha dado Maiman?”, finalizó.
A solo unos días de conocerse el pedido de extradición que realizó este martes la Sala Penal Permanente de la Corte Suprema en su contra, el exjefe de Estado resaltó encontrarse indignado y, en medio de su peculiar discurso, quebró en llanto al mencionar el fallecimiento de su hermana en Lima, quien habría fallecido esta mañana víctima de un cáncer del cual venía luchando desde 2007.
“Estoy profundamente triste y al mismo tiempo indignado. Esta maldita justicia peruana, que está politizada por el fujimorismo y el Apra, me ha impedido estar junto a mi familia, a mi hermana Margarita, que acaba de morir de cáncer”, expresó.
Por otro lado, el expresidente arremetió contra el juez Concepción Carhuancho, a quien acusó de trabajar para Alberto Fujimori en Junín y aseguró que todas sus acciones legales estaban orientadas a favorecer los intereses del APRA y el fujimorismo. Es necesario recordar que Toledo presentó dos veces el pedido de “declaratoria de competencia” para que dicho magistrado decline de seguir evaluando su expediente, y por el cual se le imputaban, según la Fiscalía, US$3’984.335 millones de parte de Camargo Correa en el caso Odebrecht, pedido que se declaró improcedente en ambas ocasiones.
Sin embargo, Toledo evitó dar declaraciones sobre el proceso de extradición en su contra, que actualmente se encuentra en manos del Consejo de Ministros, el cual determinaría su retorno forzoso, y aseguró no tener acceso a la justicia en el Perú, por lo cual refirió que todo era parte de una estrategia del Estado para utilizarlo como “chivo expiatorio” frente al escándalo de corrupción más grande de América Latina.
“¿Por qué quieren encontrar un chivo expiatorio? ¿Por que soy un cholo que no llena los requisitos? (…) Lo que más me indigna es que esta justicia vendida, que no tiene independencia y tiene una institucionalidad frágil, me ha impedido a estar cerca de mi familia. Pero me lo van a pagar, me lo van a pagar, porque esta es una venganza por la Marcha de los Cuatro Suyos”, resaltó.
Asimismo, en entrevista para Canal N, Toledo aseguró que el Perú está atravesando por una crisis en el que el presidente está “contra la pared” por los partidos políticos.
Tras estas declaraciones, a más de un año de silencio y desde la clandestinidad, solo se espera que el proceso de extradición siga su curso pese a los pedidos de apelación por parte de la defensa del líder de Perú Posible.
FUE EL MÁS BUSCADO
En 2017, el Ministerio del Interior, encabezado por Carlos Basombrío, lo incluyó en el sistema de “Los más buscados”, el cual ofrecía una recompensa de 100,000.00 soles por información sobre su paradero. Sin embargo, fue retirado de la lista puesto que descubrieron el lugar donde se hallaba.