Olmos es un distrito que forma parte de la provincia de Lambayeque, conocido a nivel nacional dada la coyuntura y las declaraciones de los altos mandos de la empresa brasilera de Odebrecht que involucraban a diversos proyectos en el país, entre ellos, el de Olmos.

En los últimos meses, ha sido escenario de protestas y movilizaciones encabezadas por el pueblo olmano exigiendo la paralización de las obras de construcción de la Nueva Ciudad en Olmos.  Mano Alzada conversó con Humberto Heredia Morales, expresidente de la comisión técnica de los Grandes Proyectos del Colegio de Ingenieros de Lambayeque (CIL), quien nos dio mayores detalles sobre el proyecto.

NUEVA CIUDAD DE OLMOS

Durante el periodo de Ollanta Humala, se destinó 650 millones de soles para la construcción de este proyecto. La Nueva Ciudad de Olmos es un proyecto del Ministerio de Vivienda Construcción y Saneamiento que tiene como objetivo crear una ciudad planificada y autosostenible en el distrito de Olmos, surge a partir de la puesta en operación del componente de irrigación del proyecto Olmos.

Con una extensión de 734 hectáreas, albergará a 111,000 habitantes con amplias zonas verdes, zonas comerciales, centros de ocio, etc. “Actualmente, se ha avanzado en un 35% en su construcción comprendiendo los aspectos de viabilidad y saneamiento”, indica Heredia.

La Nueva Ciudad de Olmos pretende ser “la primera ciudad planificada del Norte del país” y busca criterios modernos de urbanismo, para ser replicados exitosamente y mejorar la calidad de vida de la población.

PRINCIPALES CUESTIONAMIENTOS

La Nueva Ciudad de Olmos, al igual que el Proyecto Olmos, está lejos de ser el sueño anhelado de los lambayecanos. Este proyecto tiene serios cuestionamientos:

  • La Nueva Ciudad estaría envuelta en un manto de corrupción: El Perú ya conoce los negocios corruptos de Odebrecht; además, con el dinero asignado a la Nueva Ciudad se habrían desarrollado obras como La Calzada, el drenaje pluvial integral para Chiclayo y la vía de circunvalación.
  • No sería una “nueva ciudad”: A pesar de que el proyecto se presentó como una “ciudad planificada”, según expertos, este proyecto no sería tan moderno. Según Jorge Sánchez Herrera “hay pocas cosas menos sostenibles que desarrollar una nueva ciudad aislada –por el costo de dotarla de servicios básicos–, y la dificultad y tiempo que esa superposición de capas puede tomar para desarrollarse” (Fuente: Publimetro). Es decir, es un modelo de los años cincuenta.
  • No traería beneficios para el distrito: ¿Cómo es que habiendo una ciudad con tantas necesidades, se construya una Nueva Ciudad?Olmos es todavía un distrito con múltiples necesidades, los servicios básicos (energía, agua, residuos sólidos) no están cubiertos para la totalidad de la población”, señala Heredia. Por ejemplo, se destinaron 734 hectáreas para la nueva ciudad, pero todavía no se han solucionado los problemas de los campesinos que fueron despojados de sus terrenos. Recordemos que la Comunidad Campesina de Olmos se perjudicó con la expropiación de 111,000 hectáreas de tierras para la ejecución del proyecto. Por eso, una de las principales exigencias de los pobladores es que el Gobierno invierta dinero en estas necesidades y no en la Nueva Ciudad.
  • Beneficiaría a las empresas del Proyecto Olmos: Las empresas agroexportadoras que están dentro del Proyecto Olmos tendrán la facilidad de contar con personal que resida en la misma ciudad. Ya no gastarán en sus trabajadores en el tema de residencia, viáticos, salud y comercio. “Es una inversión que favorece a la gran empresa”, sentencia Heredia.

MULTIPLES DENUNCIAS Y ACCIONES CIUDADANAS

Heredia señala que se ha denunciado la corrupción en Olmos desde hace muchos años desde los medios de comunicación y la sociedad civil; indica además que es importante que el pueblo olmano exija inversión para ejecutar obras importantes para dicho distrito, además de exigir se investigue la obra.

Se ha conformado el Colectivo Ciudadano de Olmos que reúne a los ciudadanos de dicho distrito que exigen la paralización de obras de la Nueva Ciudad. Además a esta plataforma se han sumado voces autorizadas como Antonio Uriarte, decano del Colegio de Arquitectos de Lambayeque. En adición a ello, se avecina una mesa de diálogo y un paro cívico.